“Van a gritarlo con más ganas”. Esto lo escribió Ammiel San Juan, un usuario de redes sociales en respuesta al video titulado “Abrazados por el futbol”, subido a You Tube en la cuenta de Selección Nacional de México.
El contenido multimedia de 30 segundos, en donde aparecen jugadores del Tricolor, es parte de la campaña que la Federación Mexicana de Futbol emprendió contra el racismo, o más bien de forma particular contra el grito de “Eh Puto” en sus partidos.
Pero aunque pareciera un mensaje con toda la intención de estrechar lazos a favor de la discriminación y en contra de la violencia, el mensaje que dan Rafael Márquez, Miguel Layún, Diego Reyes y otros futbolistas, no tuvo el impacto que la Femexfut buscaba.
“Para nosotros las diferencias no son una barrera”, dice Javier “Chicharito” Hernández al inicio del video. “Nosotros no discriminamos”, continúa Jesús Corona, “Nosotros respetamos las opiniones de todos”, agrega Diego Reyes”, “Yo no acepto la violencia”, replica Rafa. “Para mi toda persona es digna de respeto, yo sé perdonar. Y tú, y tú…”, rematan en el mensaje.
La intención parece buena y también el tiempo en que lanzaron la campaña el ideal. Fue previo al duelo de México contra Canadá a disputarse en el estadio Azteca, sin embargo todo intento del mensaje resultó en vano y hasta contraproducente en los aficionados.
La noche del martes en el Coloso de Santa Úrsula, cientos de espectadores del cotejo corearon una y otra vez el grito de “Eh Puto” en cada ocasión que el arquero canadiense Milan Borjan despejaba la pelota.
Como si no fuese suficiente reacción, en Twitter se hizo tendencia el hashtag #MexicanosAlGritoDeEhPuto a nivel nacional con 39 mil 300 tuits, en donde se manifestaron toda clase de comentarios en contra del intento de la Femexfut por acabar con el famoso grito.
“Lamentable que @FIFAcom siga sin entender que no es homofobia, es un desmadre el grito de #eeeeeeeputo #mexicanosalgritodeputo”, escribió la tuitera Julia Nativitas en respuesta a la campaña.
Lo que parece raro es que hasta ahora la Federación se hay abocado a combatir y erradicar el grito supuestamente homofóbico, si existe desde hace muchos años como tradición entre quienes acuden a un partido, en general, de futbol en México.
Lo que no es nada raro es que suceda dos meses después de que la FIFA multara a la Femexfut con 20 mil francos suizos, algo así como 357 mil pesos mexicanos, por los gritos durante el Mundial de Brasil 2014.
Tal vez la reputación de la propia Federación Mexicana de Futbol no sea la más apropiada en este momento en que piden “respeto”, “tolerancia” y demás. Nadie olvida cuando Jesús Corona se peleó a golpes contra el preparador físico del Club Monarcas o fue ligado a un pleito de bar donde su primo habría sido el responsable.
O el caso del propio Decio de Maria en 2009, cuando el Consejo Nacional de la Federación Mexicana de Futbol lo multó con 164 mil 400 pesos por haber hecho una seña obscena a la porra de la selección de Estados Unidos durante la final de la Copa Oro, la que que México ganó 5-0.
Así que mientras la Femexfut intenta echar atrás una tradición, incluso ya exportada a otras naciones, por temor a más multas, el mexicano se empeñará en gritar con más fuerza porque así es su idiosincrasia.