Un negro panorama
El jugador ofensivo se conduce con el balón, entra al área y el defensa rival le comete falta. El árbitro voltea con su asistente en la banda y éste no le indica nada. Con esto el juez central opta por darle pie a la duda pero sin decretar algún señalamiento.
Con esta polémica y otras tantas suscitadas apenas en el inicio del Clausura 2014, la alerta por el pésimo trabajo arbitral se ha prendido entre jugadores y entrenadores de la Liga MX, sin duda un tema espinoso del cual nadie es capaz de mejorar.
Rocío Cepeda
El jugador ofensivo se conduce con el balón, entra al área y el defensa rival le comete falta. El árbitro voltea con su asistente en la banda y éste no le indica nada. Con esto el juez central opta por darle pie a la duda pero sin decretar algún señalamiento.
Con esta polémica y otras tantas suscitadas apenas en el inicio del Clausura 2014, la alerta por el pésimo trabajo arbitral se ha prendido entre jugadores y entrenadores de la Liga MX, sin duda un tema espinoso del cual nadie es capaz de mejorar.
“No la verdad que no era penal, yo nunca toco al jugador”, expresó el portero de los Pumas, Alejandro Palacios, luego del partido del domingo pasado contra Puebla en donde aseguró que el árbitro central, Erick Yair Miranda, lo perjudicó en el señalamiento de la pena máxima.
La Comisión de Arbitraje, de la Federación Mexicana de Futbol, ha estado en constante crítica por su bajo desempeño, sus fallas garrafales y su poco progreso a través de los años en la Primera División.
Con todo esto, el técnico de Tigres, Ricardo Ferretti, se tomó el tiempo para declarar ante la prensa nacional que constantemente los árbitros están del lado del equipo América, aunque ciertamente son más equipos los que han pagado los platos rotos por el trabajo de los de negro.
Tigres se sintió agraviado por no marcarse dos penales a su favor durante el pasado duelo ante América, juego que pitó Ricardo Arellano Nieves; en contraparte, en el encuentro de Atlante contra León, Marco Rodríguez regaló dos tiros de castigo a favor de los Potros de Hierro que a juicio de expertos, no eran penales.
Viene a la mente el recuerdo de las declaraciones hechas por Rafael Mancilla Orvañanos, presidente de la Comisión de Arbitraje, vertidas en abril del año pasado respecto a la “importancia” de la imperfección de los colegiados y el aporte que brindan a la televisión con la polémica que ocasionan.
“Hay personas, directivos de diferentes televisoras, que he platicado con ellos que me dicen: ‘no me hagas a los árbitros perfectos, por favor, porque me quitas rating’. La polémica arbitral es parte del juego”, aseguró Mancilla.
Sus palabras no están lejos de la realidad que el espectador del fútbol mexicano aprecia. Los “errores” tan constantes que favorecen al América, las decisiones siempre llamativas de “Chiquimarco” Rodríguez y hasta lo bien que le va a Tigres con Francisco Chacón como bien lo declaró en un video difundido en un medio del norte del país.
“A los dos equipos de Monterrey les va con madre conmigo, o sea Tigres no pierde conmigo hace, no mames, no sé cuánto tiempo fue”, dijo Chacón en el video donde increpa a la Comisión de Arbitraje para después ser sancionado con tres partidos.
Pero la mala fe continúa y los comentarios en contra de los nazarenos siguen con el paso del tiempo, al grado de que Decio de María, presidente de la Liga MX ha declarado su intención por poner manos a la obra en una mejora.
“Sí hay preocupación, hay un ocupamiento de la Comisión de Arbitraje por mejorar el tema de la capacitación de los silbantes. En la última reunión de la Liga MX, el presidente de la FMF informó que en el marco de la Comisión de Árbitros habían hecho cambios, contratado a un ex árbitro español, encargado técnico del arbitraje durante el Mundial de Sudáfrica”, externó.
“Cada situación que sucede dentro del terreno de juego en las tribunas que se sale del librito me ocupa, dentro de la liga observamos todo para poder tomar medidas y corregir”, expuso el directivo en conferencia de prensa.
Una problema es esta tendencia hacia el mal desempeño durante los partidos; una solución, sin duda tiene que ver con la constante capacitación y la aplicación de castigos sobre los árbitros cuyo trabajo haya tenido palpables cuestionantes.
No hay árbitros perfectos, en ninguna liga de futbol del mundo se dejan de cometer equivocaciones en el sector arbitral. Lo cierto es que mientras más cuidadoso se vuelva la supervisión de sus resultados, los equipos, entrenadores y sobre todo los jugadores en la cancha van a tener menos dudas de lo que marca o deja de marcar el silbante en turno.