Y a Iñárritu, ¿quién le pide cuentas?
La crítica y los cuestionamientos por el fracaso de la Selección Nacional de Futbol han recaído sobre Miguel Herrera. Lo sucedido en la Copa América Chile 2015 presiona diariamente por su continuidad. Pero, ¿el “Piojo” es al único al que se le debe juzgar por la debacle mexicana?
Los pésimos resultados de México en tres distintas selecciones nacionales son el motivo perfecto para analizar el trabajo de Héctor González Iñárritu en su rol de director de Selecciones Nacionales de la Femexfut.
Rocío Cepeda
La crítica y los cuestionamientos por el fracaso de la Selección Nacional de Futbol han recaído sobre Miguel Herrera. Lo sucedido en la Copa América Chile 2015 presiona diariamente por su continuidad. Pero, ¿el “Piojo” es al único al que se le debe juzgar por la debacle mexicana?
Los pésimos resultados de México en tres distintas selecciones nacionales son el motivo perfecto para analizar el trabajo de Héctor González Iñárritu en su rol de director de Selecciones Nacionales de la Femexfut.
Primero fue la eliminación de la Selección Sub 20 en el Mundial de Nueva Zelanda. Los dirigidos por Sergio Almaguer terminaron su participación en la competencia tras perder dos de tres partidos apenas en la fase de grupos.
Aunque negó que haya sido un fracaso, Almaguer sumó su segunda eliminación consecutiva en mundiales: primero Turquía 2013 y después Nueva Zelanda 2015. El balance en dos copas del mundo es: cinco derrotas y dos triunfos en siete partidos.
Misma suerte corrió el combinado femenil dirigido por Leonardo Cuéllar, que además de no haber cumplido su sueño de ganar su primer partido en un Mundial de categoría mayor, terminaron en un lío mediático entre la jugadora Charlyn Corral y su entrenador.
La expectativa de esta selección, de acuerdo a la Reunión de Planeación y Presentación de Objetivos de la Femexfut a inicios de año, fue que las chicas libraran la fase de grupos, pero el resultado fue un empate y dos derrotas que les costó ser eliminadas rápidamente.
Corral, jugadora insignia del Tri Femenil, no tuvo problema en alzar la voz para decir que ésta selección ya necesitaba una renovación, comenzando por el puesto de entrenador que ha ocupado Cuéllar desde hace 16 años.
Un tercer fracaso, y el que mayormente ha afectado al futbol mexicano este 2015, es el de la eliminación del Tri en Copa América, de la que Miguel Herrera soñaba con llegar hasta la Semifinal pero simplemente no pudo pasar de la fase de grupos.
El plan del “Piojo”, soportado por Iñárritu, fue hacer dos selecciones que atendieran la invitación de la Copa América y encararan la Copa Oro. Esto fue motivo principal en la eliminación dado que Herrera tuvo poco tiempo para trabajar con el Tri “B” de Chile 2015 y los resultados fueron desastrosos.
“Antes no ganábamos nada, empezamos a acostumbrar a la gente y a ustedes a triunfos; se ligaron triunfos, el ciclo olímpico se cumplió, se ganó la Copa Oro, las femeniles estuvieron calificando a los mundiales y la de hombres calificaron a todos los mundiales”, fue la defensa de Iñárritu en la avalancha de críticas.
“Hay que tomar decisiones y la gente que sea responsable de mi puesto tomarán las medidas necesarias. Ahora viene la Copa Oro, que tenemos que ganarla y debemos dar cuentas a Decio de María y a Justino Compeán”, complementó el director de Selecciones Nacional sobre su futuro.
Previo al Mundial de Brasil 2014, González Iñarritu habría puesto su renuncia sobre la mesa cuando peligraba el pase de México. Pero con la llegada del nuevo entrenador su continuidad fue resuelta.
Ahora, los rumores de su permanencia comienzan a circular. Todo indica que Héctor González Iñarritu será removido de su cargo después de la Copa Oro, aunque existe la posibilidad de que si México la gana se pueda quedar.
Esto tendría que ver también con los movimientos que se esperan ante la salida de Compeán como presidente de la Femexfut y la llegada de Decio de María en ese cargo. El uno de agosto es la fecha en que De María asumirá la presidencia.
El destino de Iñarritu está en el aire, este verano de fracasos empaña cada día más su futuro, aún cuando todavía faltan cuatro eventos de selecciones nacionales que dan la esperanza de que México enderece el camino.