Ante lo que consideró la desaceleración de la economía nacional mexicana, el miembro de Moody’s Investors Service, Jaime Reusche, recortó su estimación de crecimiento para este año a 1.7 por ciento a 2.2 por ciento anterior.
La gran cantidad de recursos monetarios que se necesita Petróleos Mexicanos (Pemex), más los cambios en políticas públicas del nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador, provocaron presiones sobre la perspectiva de la calificación soberana de México este año, advirtió la calificadora Moody’s.
Ayer la calificadora crediticia Goldman Sachs también redujo sus pronósticos de crecimiento económico de 2019 para México, y bajó su panorama para las tasa de interés en la región.
La decisión del grupo fue por el cambio de grandes bancos centrales a una política monetaria más moderada y las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, con la posibilidad de afectar el crecimiento en la región.