Durante julio, los supermercados ponen en marcha la campaña ‘temporada naranja’, con la que incentivan el consumo de las personas mediante promociones y descuentos. Este año, El Mundial y el incremento en el gasto por el periodo electoral impulsaron las ventas del inicio de la época, de acuerdo con un reporte de Walmart de México y Centroamérica.
En esta temporada se incrementa la competencia entre las principales minoristas del país. Soriana realiza su ‘Julio Regalado’, la Comer su famosa ‘Temporada Naranja’ y Walmart se promociona con ‘Rebajas para todos’.
En el verano, los consumidores acuden a los establecimientos en busca de mejores precios y de las promociones 2×1, las cuales pueden ser una buena alternativa para estirar el gasto familiar.
Sin embargo, en los clubes de precios como Sam’s Club y Costco se ofrecen precios más accesibles todo el año, en una presentación a granel o de mayoreo, a diferencia de los supermercados que sólo en determinadas temporadas del año los ofrecen.
Finerio, una aplicación que ayuda a controlar los gastos personales, realizó un análisis comparativo en el que pone sobre la mesa las diferencias que hay en estos dos segmentos.
Respecto a la ubicación encontró que mientras los clubes de precio están en zonas más alejadas y existen menor cantidad de sucursales, los supermercados se encuentran en zonas concurridas, cerca de sitios estratégicos como paradas de autobuses, escuelas y lugares de trabajo, que los hacen de fácil acceso, sin tener que acudir necesariamente con un automóvil.
En el diseño y edificación, las dimensiones de una tienda de autoservicio son más pequeñas que las de un club de precios, además, en las grandes tiendas no se encuentran artículos con diseños atractivos o llamativos, debido a que funcionan como almacén y tienda.
Dependiendo de la cantidad del producto que se busque es el lugar al que se debe acudir. En Sam’s Club y Costco los artículos están disponibles en paquetes de tres, seis o más piezas, mientras que en Soriana y La Comer se venden por pieza.
La gran diferencia que hay entre un supermercado y un club de precios es que para poder acceder al primero no se necesita una membresía para poder entrar y comprar.
Datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) revelan que los clubes de precios están diseñados para un segmento de la población con un ingreso medio y alto, ya que el ticket promedio está por encima de los mil pesos por cada compra.
Sin importar qué opción se elija, Finerio recomienda hacer una lista de productos de lo que realmente se necesita, con el propósito de evitar un desequilibrio en las finanzas familiares, también es importante comparar los precios de estos establecimientos con otros formatos de tienda.