El golpe puede doler a todos. Pareciera que la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) sólo afectará los intereses de la cúpula empresarial. Sin embargo, la realidad es que también existe un riesgo de que las finanzas de los mexicanos se vean comprometidas.
“La cancelación del proyecto provocó una reacción en cadena que va a afectar a muchas personas de manera directa e indirecta. Ya generó incertidumbre y temores en distintos niveles de la economía”, dice Sergio Negrete, investigador de la Escuela de Negocios del ITESO.
Especialistas consultados consideran que existen al menos cuatro factores de riesgo que podrían generar un descalabro al bolsillo del ciudadano de a pie en el corto plazo:
- Dólar caro
- Incremento de la inflación
- Alza en tasas de interés
- Minusvalías en las Afores
Desde el domingo pasado, el peso ha sufrido altibajos derivado del nerviosismo en los mercados financieros por la confirmación de la cancelación del proyecto de infraestructura y otros factores externos. Esta situación provocó que la moneda mexicana borrara las ganancias acumuladas en lo que va de este año.
Guillermo Barba, editor del boletín de inversiones Top Money Report, explica que un dólar más caro provoca una afectación al poder adquisitivo de la población, es decir que el valor de su dinero se reduce y por lo tanto les alcanza para comprar menos.
“Se vienen tiempos difíciles, por lo tanto es necesario ahorrar y preparar un presupuesto para gastar lo menos posible”
“El efecto negativo es inmediato porque la mayoría de los mexicanos ahorra y gasta en pesos. En el mediano y largo plazos esto puede tener implicaciones más graves porque al perder poder de compra, el dinero que cargan en la cartera vale menos”, precisa el economista.
Un análisis de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) revela que el salario de los mexicanos ha perdido 5 por ciento de su poder adquisitivo de septiembre de 2017 al mismo mes de 2018. Pero el organismo advierte que extraoficialmente la cifra es mucho mayor al asegurar que en algunos casos puede ser por encima del 20 por ciento comparación año con año.
El alza del dólar también provoca que los productos importados de consumo masivo se encarezcan. Entre los sectores que dependen de esta clase de mercancías destacan el de alimentos, farmacéutico, textil, electrodomésticos y automotriz
Al respecto, María Elvira Méndez, especialista en finanzas de la Facultad de Negocios de la Universidad La Salle, considera que otro insumo que podría elevar su precio es la gasolina, debido a que México importa alrededor del 75 por ciento de su combustible.
“Existe el riesgo de que en las próximas semanas todos estos productos que está tasados en dólares experimenten un alza en sus precios y ese costo se transmitirá a las familias mexicanas”, añade. El incremento que han tenido los precios de energéticos y las proyecciones sobre su cotización internacional representan un riesgo para la inflación que preocupa al Banco de México (Banxico).
Durante los primeros 15 días de octubre, la inflación registró una desaceleración tras dos quincenas consecutivas de mostrar una tendencia al alza, según el Inegi.
0.25
En la primera quincena de este mes, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se ubicó en 4.94 por ciento a tasa anual. Aunque el dato fue menor al 5 por ciento pronosticado por analistas, los riesgos por los precios de los energéticos parecen no desaparecer, además de que el indicador aún se encuentra lejos de la meta objetivo del banco central de 3 por ciento.
Banxico puede meter presión
Los especialistas aseguran que el actual nivel de la inflación aunado al desplome de la moneda mexicana podrían llevar a Banxico a aumentar la tasa de interés en 0.25 por ciento durante su próxima reunión de política monetaria en un intento por frenar la caída del peso.
En consecuencia, Sergio Negrete, del ITESO, adelanta que esto ocasionaría que algunos de los créditos contraídos por los mexicanos se encarezcan. Aunque el especialista recalca que “el impacto dependerá del esquema en el que se encuentren”.
Por ejemplo, si el consumidor tiene contratado un crédito crédito automotriz o hipotecario a tasa fija, el incremento no tendrá un efecto negativo, a menos que se encuentren a tasa flotante (variable).
También se espera que la cancelación del NAIM genere una afectación a las Afores, a pesar de que la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos para el Retiro (Amafore) aseguró en días pasados que el ahorro invertido en la obra no se verá afectado.
María Elvira Méndez, de La Salle, expone que la sacudida ocasionada por el revés al Nuevo Aeropuerto podría ocasionar que se registren minusvalías. Es decir, que los rendimientos de las Afores se reducirían, pero esto se verá reflejado de manera paulatina.
Frente a esta compleja situación, la especialista en finanzas comparte una recomendación para que los mexicanos puedan proteger sus ahorros.
“Una buena manera de enfrentar la incertidumbre es generar una fuente de ingresos adicionales”
“Todas las personas que estén afiliadas a las Afores que participaron en este proyecto deben consultar su cartera y revisar si hubo una afectación. En caso de haberla es recomendable que analicen la posibilidad de cambiarse lo antes posible o que hagan la reclamación directamente con las autoridades financieras competentes”.
