Las señas alentadoras siguen haciéndose presentes en la economía de Estados Unidos.
Durante el segundo trimestre del 2015 el producto interno bruto (PIB) de la mayor economía del mundo creció a un ritmo anualizado de 2.3 por ciento, según reveló ayer el Departamento de Comercio de Estados Unidos.
Al realizar el anuncio, la agencia estadounidense además revisó hacia arriba el crecimiento del PIB correspondiente al primer trimestre, que pasó de una contracción de 0.2 por ciento a una expansión de 0.6 por ciento.
Para México, la continua recuperación de su mayor socio comercial y consumidor de exportaciones es una buena noticia. Sin embargo, esto también podría empujar a la Reserva Federal (Fed), el banco central estadounidense, a subir su tasa de interés de referencia antes de lo previsto.
Después de realizar recortes consecutivos en su tasa de interés durante los últimos nueve años y de fijarla en un mínimo histórico cercano al 0 por ciento como respuesta a la crisis del 2008, la Fed ha señalizado que busca alzar su tasa durante este año.
Históricamente, un alza en la tasa de interés estadounidense ha resultado en fugas de capital y depreciaciones de divisas en los países emergentes como México. Con el valor del peso actualmente tocando mínimos históricos frente al dólar, una alza por parte de la Fed podría presionar aún más a la moneda mexicana.
Lento pero seguro
El consenso en los mercados señala que si la Fed quiere cumplir con las expectativas de alzar su tasa en este año esta decisión se daría durante su reunión de política monetaria de septiembre o durante la de diciembre.
La Fed ha evitado dar señales claras acerca de cuándo comenzará el alza, pero el desempeño de los mercados de futuros coloca la probabilidad de que esto ocurra durante septiembre en 44 por ciento.
Y es que aunque el crecimiento reportado para el segundo trimestre estuvo ligeramente por debajo de las expectativas de 80 economistas encuestados por Bloomberg, sigue siendo una clara señal de recuperación que se alinea con la tendencia de los últimos tres años.
Por su parte Bill Gross, co-fundador de la administradora de activos Pimco, piensa que la Fed alzará su tasa en septiembre, ya que las autoridades monetarias estadounidenses se están dando cuenta cada vez más de las distorsiones negativas que causan en los mercados la prolongación de las políticas monetarias acomodaticias.
“La Fed está empezando a reconocer que las tasas de interés de 0 por ciento cada vez tienen más consecuencias negativas tanto como positivas”, declaró Gross, quien solía administrar el fondo de bonos más grande del mundo.