A la caza global de los evasores
Para las grandes empresas multinacionales, cada día será más difícil evadir impuestos.
En una decisión que ha sido llamada una oportunidad “de una vez en el siglo”, el Grupo de los 20 (G20), que engloba a las mayores economías del mundo, anunció el viernes que respaldará una reforma en las leyes tributarias, cerrando lagunas legales utilizadas por empresas como Apple, Google y Amazon para evitar pagar miles de millones de dólares en impuestos.
Rolando Hinojosahttp://www.youtube.com/watch?v=fDiHAKZbo-0
Para las grandes empresas multinacionales, cada día será más difícil evadir impuestos.
En una decisión que ha sido llamada una oportunidad “de una vez en el siglo”, el Grupo de los 20 (G20), que engloba a las mayores economías del mundo, anunció el viernes que respaldará una reforma en las leyes tributarias, cerrando lagunas legales utilizadas por empresas como Apple, Google y Amazon para evitar pagar miles de millones de dólares en impuestos.
La decisión está apoyada en un plan de acción diseñado por la Organización para la Coperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que ha apuntado que los sistemas tributarios actuales no funcionan y que es necesario un esfuerzo de cooperación internacional para frenar la evasión fiscal.
En su reporte al respecto, la organización indica que el problema es parcialmente producto de las nuevas estructuras transfronterizas de las empresas, pero que la mayor causa es “la creciente sofisticación de los planeadores fiscales (de las empresas) para identificar y explotar las oportunidades de arbitraje legal y los límites de la planeación tributaria aceptable”.
En México, país miembro de ambas organizaciones, la relevancia de la decisión se incrementa al tomar en cuenta el debate alrededor de la propuesta de realizar una reforma fiscal que aumente la recaudación tributaria e impulse el crecimiento.
En el pasado se ha criticado que en el país las empresas tienen mayor facilidad que en países como Estados Unidos no para hacer negocios, pero sí para evitar impuestos.
El gobierno del presidente Enrique Peña Nieto ha declarado que enviará una iniciativa de reforma a la Cámara de Diputados durante la segunda mitad de este año.
En su “Plan de acción sobre la erosión de la base impositiva y la transferencia de ganancias” (APBEPS por sus iniciales en inglés), la OCDE indica que la reducción de la carga tributaria de las empresas multinacionales a través de diversos métodos de evasión tiene efectos negativos.
De entrada, los gobiernos se enfrentan a una situación con menores ingresos y con mayores costos administrativos para asegurar la recaudación, lo cual dificulta la inversión pública efectiva.
Además, la integridad del sistema tributario se ve afectada, ya que el público comienza a ver los impuestos gravados contra las empresas como injustamente bajos.
Para los contribuyentes individuales, cuando las normas tributarias permiten a las empresas reducir sus impuestos al transferir sus ingresos a jurisdicciones diferentes a donde realizan sus actividades productivas, otros contribuyentes en esas áreas tienen que compensar y pagar más impuestos.
Las mismas empresas multinacionales se ven afectadas, ya que si se percibe que sus impuestos son demasiados bajos, su reputación se puede ver manchada.
Además, para las empresas domésticas es más difícil competir contra las multinacionales, ya que no pueden reducir sus impuestos de la misma manera. De esta forma, las técnicas de evasión crean una distorsión que lastima la competencia.
Las reformas propuestas
El APBEPS que ahora apoya el G20 incluye una serie de propuestas que buscan unificar las normas fiscales en sus países miembro, atacar el problema de la evasión de una forma moderna, y simplificar las reglas del comercio internacional.
Actualmente, el sistema es gobernado por una red de cientos de tratados bilaterales que han sido creados a través de casi un siglo.
Entre los elementos del APBEPS destacan algunas propuestas interesantes. Por ejemplo, se requeriría que las empresas multinacionales de comercio en línea, como Amazon, que tengan operaciones extensas de bodegas en otros países tengan que pagar impuestos locales sobre cualquier ganancia generada en ese país.
Adicionalmente, las normas obligarían a las empresas a revelar a las autoridades fiscales un desglose, país por país, de sus ventas, ingresos, impuestos pagados y otras medidas de actividad económica.
Las empresas también tendrían que informar a las autoridades sobre la estructura de su planeación fiscal, que a menudo se aprovecha de la limitada información local con la que cuentan los gobiernos para ocultar prácticas cuestionables.
El APBEPS propone medidas para limitar el uso de complejos esquemas financieros dedicados a realizar transferencias internacionales de las ganancias corporativas hacia subsidiarias localizadas en países considerados como paraísos fiscales.
En mayo de este año, Apple estuvo bajo el escrutinio de los legisladores estadounidenses por usar una estrategia cuestionable, pero legal, para transferir fondos a sus subsidiarias en el extranjero y ahorrarse casi 30 mil millones de dólares en impuestos.
El G20 ha acordado introducir una serie de mecanismos que buscará facilitar y agilizar la implementación de las 15 recomendaciones del APBEPS, y espera que, de ser adoptadas, estas sean implementadas durante los siguientes dos años.
Impacto en México
Las nuevas disposiciones para la cooperación en materia de evasión fiscal serán aplicables a México, ya que el país es parte de los miembros del G20 y de la OCDE.
El plan aprobado por las mayores economías del mundo tiene previsto que los gobiernos implementen disposiciones legales locales para combatir la evasión fiscal internacional.
Para esto, México tendrá que desarrollar una plataforma operativa para intercambiar información fiscal de manera automática a gobiernos de países extranjeros.
Será necesario crear un marco legal y administrativo que asegure la confidencialidad de los contribuyentes. Esto significa homologar reportes que sean compatibles con nuevas tecnologías.
Para Luis Videgaray, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, y los legisladores mexicanos, el adoptar estas recomendaciones significa que la tarea de la reforma fiscal ahora tendrá que acatar estas recomendaciones internacionales.
Pero la tarea, aunque compleja, es necesaria, no solo para beneficio del gobierno, sino también para el de los contribuyentes.