Un invierno que congela a la economía
En Estados Unidos, el invierno ha enfríado más que el aire, pues la economía también se ha visto congelada debido a los efectos de las inusualmente bajas temperaturas y de las tormentas invernales que han azotado este país.
El impacto negativo se ha observado desde la creación de empleos y la producción manufacturera hasta las ventas minoristas, y se estima que las cosas aun van a empeorar.
Rolando HinojosaEn Estados Unidos, el invierno ha enfríado más que el aire, pues la economía también se ha visto congelada debido a los efectos de las inusualmente bajas temperaturas y de las tormentas invernales que han azotado este país.
El impacto negativo se ha observado desde la creación de empleos y la producción manufacturera hasta las ventas minoristas, y se estima que las cosas aun van a empeorar.
Ante esta situación, es fácil dejarse llevar pensando en cómo se vería la economía estadounidense y la recuperación que tanto se ha buscado si no existieran estas condiciones climáticas.
Y, aunque el hubiera no existe, The Wall Street Journal reporta que un análisis realizado por Spencer Hill, un economista de Morgan Stanley, ha pretendido hacer justo eso y mostrar qué hubiera pasado en este caso.
El reporte de Hill muestra que las industrias de la construcción y de la manufactura han sido las más golpeadas por el invierno.
El caso de la manufactura es particularmente problemático para México, ya que las industrias manufactureras de ambos países están vinculadas, y los efectos de esta caída en la producción también se han sentido aquí durante el mes de enero.
Lo que hubiera sido
Contra estimaciones de 8 por ciento y de 7.8 por ciento sin efectos climáticos, Morgan Stanley prevé que dos de los indicadores de construcción (la cantidad de permisos otorgados y de ventas residenciales) reportarán crecimiento de 4 por ciento y de 0.2 por ciento, respectivamente. Al mismo tiempo, el índice ISM del sector manufacturero y las ventas anualizadas de automóviles también han resultado muy por debajo de lo que se estima hubiese sucedido sin las tormentas.
En el caso del primer indicador, este cayó casi dos puntos por debajo de la alternativa estimada por Morgan Stanley, mientras que en el caso del Segundo, en lugar de crecer 1.8 por ciento, este se encogió uno por ciento.
Además de estos sectores, otra área de la economía que se ha visto afectada es el de la venta minorista. Contra crecimiento estimado de 0.5 por ciento sin el clima extremo, el indicador de ventas minoristas se encogió en enero 0.2 por ciento, el segundo mes consecutivo de caída.
Aunque los especialistas apuntan que es probable que cuando el clima cambie las condiciones económicas se recuperen y se compense esta desaceleración, hay ciertos sectores económicos que no recuperarán lo que han perdido en este periodo (como lo son los restaurantes y otras áreas de consumo).
Se estima que esto representa alrededor de 15 mil millones de dólares en pérdidas de producción.