Si bien fueron útiles (los controles) tenemos todavía que tener algunos adicionales para reaccionar de una manera que esté más basado en reglas y menos basado en una situación como la que ese viernes, para la bolsa, francamente fue difícil de manejar
Sin lugar a duda seguirán existiendo errores en la Bolsa Mexicana de Valores, pues por más innovadoras que sean las medidas de seguridad que se establezcan siempre existirá el riesgo de error.
Después del evento del ya famoso viernes 13 de abril, hay que revisar problemas de raíz, no solamente buscar soluciones particulares.
Guillermo Babatz, director de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, explicó los mecanismos de corrección de la bolsa durante una entrevista.
“Si bien fueron útiles (los controles) tenemos todavía que tener algunos adicionales para reaccionar de una manera que esté más basado en reglas y menos basado en una situación como la que ese viernes, para la bolsa, francamente fue difícil de manejar”
Pidió recordar que el mercado es un conjunto de reglas que generan incentivos. La regulación es una distorsión de mercado que debería hacer que estos incentivos hagan que la gente tome decisiones que contribuyan al mayor bienestar.
Así como se corrigió el error que cometió Bulltick, los incentivos para controlar los errores, no solo por esta casa de bolsa sino por todas las demás, serán menores.
Aunque a nivel internacional se piensa que la innovación regulatoria debe ir enfocada a evitar problemas antes de que ocurran, no simplemente a encontrar la solución para reducir los impactos negativos.
Al menos esta fue la idea con la que la Reserva Federal negó el rescate de la gigante financiera Lehman Brothers.
Teniendo en mente el impacto negativo que iba a tener en la economía, consideró más importante dejar en claro que una empresa no puede funcionar de manera incorrecta y ser rescatada por el gobierno.
Así, en lugar de “trabajar para que haya más reglas de protocolo”, como expresa Babatz, sería mejor que se enfocara en establecer condiciones para que las empresas tengan por seguro que no se pueden dar el lujo de cometer errores mínimos, sobretodo en el mercado financiero, en donde los errores no se pueden corregir.
