Los niveles de aprobación del presidente Barack Obama hicieron ayer historia, pero por ser los más bajos de las últimas cuatro décadas en Estados Unidos.
En su quinto año de mandato, solo 43 por ciento de los estadounidenses aprueban la gestión de Obama y el 55 por ciento la desaprueban, reveló ayer la encuesta de The Washington Post/ABC.
La cifra de aceptación tuvo una caída de 11 puntos porcentuales con respecto al año pasado, cuando la popularidad del mandatario se ubicó en 53 por ciento.
Desde la Segunda Guerra Mundial, el nivel de aprobación es el más bajo entre casi todos los presidentes que han tenido dos mandatos.
El único mandatario que ha obtenido indicadores más bajos que Obama es Richard Nixon, quien en 1973 concluyó su quinto año de gestión con un nivel de aprobación de apenas 29 por ciento por el escándalo de Watergate.
El error más grande del actual presidente es el fallido sistema de salud: 62 por ciento de los estadounidenses desaprueban la mala administración de Obamacare.
Los resultados han puesto a temblar a los demócratas, quienes el próximo año se enfrentarán a los republicanos en elecciones de medio término para reestructurar el Congreso.
Con 41 por ciento, los republicanos empataron con Obama en la respuesta a la pregunta: “¿quién puede lidiar mejor con los principales problemas del país?”.