El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, terminó otra visita de Estado, esta vez, realizada en México junto a su homólogo Andrés Manuel López Obrador.
Juntos, abordaron diversos temas de interés, como la importancia de sus pueblos originarios, a través de la ceremonia Petición de Perdón a los Pueblos Originarios, llevada a cabo en Quintana Roo.
Ahí, el presidente Giammattei destacó que la reconciliación con estas comunidades (de las cuales Guatemala tiene 24 grupos étnicos) es lo que permite fortalecer los vínculos de hermandad entre México y su país.
Sin embargo, Jimena Esquivel Leáutaud, internacionalista y académica de la Universidad Iberoamericana, asegura al respecto que, aunque este tipo de eventos son importantes para ambas naciones, en realidad deberían tomarse como una oportunidad para ejecutar acciones.
“La primera jornada de esta visita fue para participar en esos actos de perdón que creo que son interesantes e importantes, eso habla de lo que compartimos como países, pero en los dos territorios estas comunidades han sido discriminadas. Y si bien es un tema político-diplomático, es momento de pasar de los diálogos a las acciones”, detalla la catedrática.
De acuerdo con el Grupo de Trabajo Internacional para Asuntos Indígenas (IWGIA), el desequilibro social de estas comunidades en Guatemala es evidente al registrar que, mientras 7.4 por ciento de la población no indígena vive en extrema pobreza, 21.8 de la indígena vive en la misma situación.
“A pesar de la magnitud del problema, el Estado no ha desarrollado estrategias específicas para cambiar esta situación”, destaca el IWGIA, a través de su página oficial.
Por otra parte, entre otro de los temas que Alejandro Giammattei entabló con su homólogo mexicano tuvo que ver con la migración y la seguridad de sus fronteras, tomando en cuenta que día con día cientos de guatemaltecos buscan cruzar a México y quedarse en el territorio, o alcanzar el sueño americano en Estados Unidos.
Pero a pesar de los deseos de los migrantes, diariamente son deportados de los países de América del Norte decenas de guatemaltecos que, probablemente, buscaban escapar de su lugar de origen debido a una crisis económica, de salud o de violencia.
Según datos del Instituto Guatemalteco de Migración, entre enero y febrero de este año, 952 guatemaltecos fueron deportados de Estados Unidos, y cuatro mil 495 de México.
Entre esos números, ocho menores de edad no acompañados fueron deportados de Estados Unidos, y 253 de México.
Para la internacionalista Jimena Esquivel Leáutaud, es esta una de las razones por las que México y Guatemala deben seguir trabajando en conjunto, para evitar que más niños y niñas sean encontrados solos.
“El tema de la migración va a ser un tema difícil (para ambos países), sobre todo en el aspecto de los niños no acompañados, porque al pasar por México, ellos incluso pueden ser violentados, ser víctimas del crimen organizado o del trabajo infantil”, dice Esquivel Leáutaud.
El plan bilateral de Alejandro Giammattei y AMLO
Ayer por la tarde, mientras se le despedía de México al presidente Giammattei, Andrés Manuel López Obrador informó que los cancilleres de ambos países firmaron un acuerdo en el que se establece la aplicación en Guatemala de los programas Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro.
El objetivo de estos proyectos es ayudar a reducir la ola migratoria a través del pago por la siembra de árboles, en el caso de Sembrando Vida, y del impulso laboral de las juventudes, con Jóvenes Construyendo Futuro.
Ante estos programas, Norma Soto Castañeda, internacionalista de la Universidad Iberoamericana, admite que serán una gran alternativa frente al problema migrante; sin embargo, hay puntos que se deben considerar.
Para ella, es indispensable que, junto a la aplicación de estos proyectos, se le ofrezca a la gente apoyo psicológico para ayudarles a quitarse la idea constante de que migrar es la única alternativa que tienen para salir adelante.
“Porque, por más apoyo que se les quiera dar a través de proyectos como estos, la mayoría de la gente siempre va a tener en mente que es mejor irse a otro país que estár en su territorio”, admite Soto Castañeda.
Además, la académica resalta que para que estos programas tengan el efecto que se espera, tanto el gobierno de México como el de Guatemala no deben dejar de monitorearlos, de darles seguimiento.
“El gran reto que tendrán es que estas propuestas funcionen y que ninguno de los dos (países) los abandonen, porque muchas veces se lanza un programa, pero después se olvida. Así que, si quieren que esto dé frutos, no deben perder la vigilancia, las evaluaciones y el apoyo”, agrega.
Se solidariza con México
El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, se solidarizó con México debido al incidente reportado en la línea 12 del metro de la Ciudad de México.
A través de sus redes sociales, el jefe de Estado aseguró que “en nombre del gobierno y pueblo de Guatemala expreso nuestras sinceras condolencias por la irreparable pérdida de vidas y extendemos nuestra solidaridad al pueblo mexicano por el terrible accidente”.
Al igual que Giammattei, otros representantes internacionales mandaron apoyo a los mexicanos, como Justin Trudeau, primer ministro de Canadá, y Kamala Harris, vicepresidenta de Estados Unidos.