Obama, con un pie afuera

Parece que el señor Obama gobierna de las fronteras de Estados Unidos (EU) hacia afuera. Los eventos de los últimos días han centrado toda la política estadounidense en asuntos exteriores. 

Con las elecciones de medio término a la vuelta, los demócratas y republicanos siguen en medio de una batalla campal. Los desacuerdos por la reforma migratoria, la reforma sanitaria y el manejo de la administración de Obama son base fija en la mesa del Congreso. 

Pero esto no los distrae de otorgarle el protagonismo a las relaciones exteriores. 

A senadores y representantes se les une el presidente, que parece desviar toda la atención de la política de EU hacia los conflictos ajenos. 

En su agenda están temas fijos como  las conversaciones nucleares con Irán, la participación en conflictos en ultramar y el pacto comercial transpacífico con Asia. 

Incluso ayer firmó un contrato con Filipinas que le otorgará a los aviones, barcos de guerra y tropas estadounidenses más acceso a la nación asiática, sin establecer una base permanente. 

“Nuestra meta no es luchar contra China. Nuestra meta no es contener a China. Nuestra meta es asegurarnos que las reglas y normas internacionales sean respetadas y eso incluye las áreas con disputas internacionales”, aseguró el presidente en conferencia de prensa. 

Y aunque esto pueda ocasionarle problemas con China por las disputas territoriales que este tiene con Filipinas y otras potencias como Japón y Corea del Sur, el acuerdo es una meta cumplida para el mandatario estadounidense. 

Incluso, aprovechó la visita por Corea del Sur para dejar clara la situación de este con Corea del Norte.

“China está empezando a reconocer que Corea del Norte no representa solamente una molestia, sino también una amenaza significativa para su propia seguridad”, indicó Obama en una rueda de prensa conjunta con la presidenta surcoreana Park Geun-Hye.

Barack puede con todo

Aunque el presidente esté en el continente asiático cumpliendo sus objetivos, su atención no está únicamente fuera de su país sino en todas las naciones que representan un conflicto.

Y su colega Vladimir Putin parece llevarse un gran pedazo de ese pastel. 

Los conflictos con Rusia y Ucrania no han cesado a pesar de los intentos de la comunidad internacional. Y las facturas por los levantamientos las está pagando el mandatario ruso. 

Ayer tirotearon al alcalde de la ciudad de Járkov en Ucrania, Guennadi Kernes, quien ahora “se debate entre la vida y la muerte”, informó el diario El País. 

El mismo día, EU anunció nuevas sanciones a oficiales y compañías relacionadas con el círculo cercano del presidente Putin. 

“El objetivo no es ir detrás del señor Putin personalmente. El objetivo es cambiar sus cálculos con respecto las acciones recientes en las que participa en Ucrania pueden tener un impacto adverso en la economía rusa a largo plazo”, dijo ayer Obama en la capital filipina, Manila. 

No es ‘sexy’

Algunos lo critican por no intervenir mucho, otros piden dejar de lado los conflictos internacionales. Las criticas hacia el presidente Obama han fluido entre los políticos estadounidenses de tal manera, que han tomado posesión de los titulares y han captado la atención del demócrata a kilómetros de distancia. 

“El presidente Barack Obama presentó una defensa a plena voz de la política exterior su administración, defendiéndose de legisladores y analistas que han criticado su respuesta a las crisis en Siria y Ucrania”, publicó ayer Bloomberg News. 

Aseguró que todo lo ha hecho para evitar “errores” y que la milicia estadounidense debía reservarse para cuando fuera extremadamente necesaria. 

“Puede que no siempre sea sexy. Puede que no siempre atraiga mucha atención, y no sea un buen argumento para los programas de los domingos por la mañana. Pero evita errores. Pegas sencillos, pegas dobles; de vez en cuando seremos capaces de conectar un home run. Pero promovemos constantemente los intereses del pueblo estadounidense y nuestra asociación con personas alrededor del mundo”, aseguró el mandatario sobre su política exterior.