Años de espera llegaron a su fin, “Liga de la Justicia” arribó para esclarecer las dudas que su director Zack Snyder sembró en la entrega pasada, “Batman v. Superman: El Origen de la Justicia” (2016), por ejemplo ¿qué sucederá con el último hijo de Kriptón y su deceso tras la batalla contra Doomsday?
La cinta de 2016 fue duramente criticada, el tono oscuro y su longitud de 151 minutos no le hicieron favorable para los infantes, además de que el conflicto principal entre el murciélago de Gotham y el vigilante de Metrópolis se resuelve sólo porque sus madres se llaman Martha.
Falta tener en el radar que Snyder viene de ser un geek de los cómics, en 2006 hizo “300” de Frank Miller y nadie se quejó de su tendencia sangrienta y mordaz y en 2009 se atrevió a adaptar el cómic máximo que se supone era inadaptable al cine “Watchmen” –de Alan Moore– que también cuenta con violencia gráfica desmedida.
Snyder demostró que tenía todo el potencial para que Warner al fin hiciera su propio universo cinematográfico con DC Cómics y el cineasta hizo lo que mejor sabe hacer: tomar una historieta y endurecer su ángulo hacia un público maduro diciéndole adiós a realizar películas para un mercado infantil.
Primero llegó “Hombre de Acero” (2013) y desde ahí se sintió su toque serio y sólido al mostrar un Superman fuera de lo ordinario, Henry Cavill le impregnó un tono de duda entre adaptarse a la Tierra y sentirse ajeno al planeta.
Este mismo contraste se observó en “Batman v. Superman”, un Caballero de la Noche cansado y hastiado del mundo que dejó de usar tácticas blandas, para ahora si castigar a los criminales incluso a punta de pistola.
Pero al venirse el desagrado del consumidor en la taquilla, Warner le puso un freno a Snyder, no más filmes mayores a dos horas, menos tono oscuro, menos fan pero sí más chistes, más estilo The Avengers de Marvel, más infantil.
Es notorio desde el inicio de la cinta que el corte no es de Snyder, Joss Whedon tuvo que llegar a “salvar” la producción en mayo pasado cuando Snyder tuvo que dejar la post producción de “Liga de la Justicia” debido al suicidio de su hija, por lo que el largometraje fue tasajeado a diestra y siniestra.
Basta con recorrer los avances que se presentaron del filme, hay varias escenas que no se usaron en el corte final y si están en los trailers, es probable que la versión de Snyder iba a durar cerca de dos horas y media o más.
Por complacer al público general Warner Bros. dejó de lado a sus espectadores de nicho, la apuesta arriesgada por hacer un cine maduro de superhéroes naufragó con esta producción, ahora sólo falta ver si llegará un corte extendido cuando salga a la venta en el mercado digital.
¿Acaso hay justicia para “Liga de la Justicia”?