La llegada del panista Roberto Gil a la presidencia del Senado significó el regreso a la austeridad.
En la reciente visita del secretario de la OEA al Senado, llamó la atención que no se sacó para la recepción la alfombra roja y los faustos que tanto le gustaban al perredista Miguel Barbosa.
El expresidente de la Mesa Directiva del Senado no debe de extrañar mucho su cargo: sigue utilizando su camioneta GMC Yukon Denali, placas 894-AAA, que tuvo un costo para el Senado de 894 mil pesos.
La verdad es que en la Ciudad de México el originario de Zinacatepec, Puebla, pasaría desapercibido con su vehículo de lujo sino fuera por la escolta de dos motociclistas que le abren paso para que no pierda su valioso tiempo en el tráfico capitalino.
¿Será que don Miguel también paga estas prestaciones de su bolsillo como le gusta presumir cuando viaja por el Mundo?
El destape de “Layín”
El destape de Hilario Ramírez Villanueva, “El Amigo Layín”, como aspirante a la gubernatura de Nayarit, provocó muchas olas.
El tema es que el controvertido presidente municipal de San Blas no va solo en su proyecto. Nos aseguran que su candidatura está “apadrinada” por el gobernador priista de Nayarit, Roberto Sandoval, que tiene una extraña debilidad por los candidatos independientes, como ocurrió con Jaime Rodríguez, “El Bronco”, a quien apoyó para convertirse en gobernador de Nuevo León.
Yunes alcanza su fuero
Bien dicen que el miedo no anda en burro. Eso lo sabe bien el panista Miguel Ángel Yunes Linares.
Más tardaron los priistas en decir que la PGR ya lo está investigando por supuesto enriquecimiento ilícito, que él en venir a tomar protesta como diputado federal.
Resulta que no había acudido a San Lázaro porque su hijo, el senador Fernando Yunes, se puso muy grave de neumonía durante unas vacaciones por Europa, por lo que no había tomado la protesta para tener fuero… perdón, para ser oficialmente diputado.
Y como ha escuchado aquel otro dicho de “si ves las barbas de tu vecino cortar”, Yunes vio un ejemplo en el priista David Sánchez –detenido horas antes de tomar protesta– para correr a jurar como legislador desde el martes.
¡Ah, qué nuestros diputados!