El que fue balconeado junto a Felipe Calderón, así haya sido por unos minutos, en el desfile del domingo pasado fue Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública.
La reaparición no dejó de sorprender hasta al embajador estadounidense, porque el jefe de la Policía Federal se ha hecho ojo de hormiga después del incidente de “Tres Marías”, como si lo buscara la CIA.
Probablemente por eso, y por muchas cosas más, el jefe de de 36 mil elementos que integran el “ejército negro” de la Policía Federal no fue invitado a pasar “revista” a las tropas en el vehículo militar en donde iban el secretario de la Defensa Nacional y el secretario de Marina.
Solo faltaron submarinos
Después de ver el despliegue del sofisticado armamento del ejército de García Luna, cualquiera puede comprender mejor porqué el secretario de Seguridad Pública fue el favorito del sexenio.
Y es que después de ver el despliegue del armamento de Genaro se podría llegar a la conclusión que lo único que le faltó a la Policía Federal fueron buques de guerra y submarinos.
Porque tratándose de naves aéreas, solamente el ejército de Genaro cuenta con los poderosos helicópteros blindados Black Hawk.
También fue sorprendente ver cómo las tropas de élite del secretario de Seguridad Publica también están integradas por francotiradores mimetizados, así como tropas de rescate de la población para casos de desastres naturales.
Eso sí, lo que no fue para nada inteligente, es que el secretario de Seguridad Pública hiciera desfilar a los integrantes de sus cuerpos de inteligencia.
¿Qué tal si les sacaron fotografías los cuerpos de la contrainteligencia?
Las ausencias
Lo que nadie ha podido explicar bien a bien, fue a qué se debieron las ausencias de Felipe Calderón durante el desfile. Alguna de ellas hasta por 10 minutos.
Fuera de la imperiosa necesidad de ir a donde el “rey va solo” ¿Qué mas podría haber obligado al jefe del Ejecutivo a desaparecer del balcón?
Nos reportan que la clave está en los mensajes y llamadas que Felipe Calderón estuvo haciendo por su celular encriptado.
La campaña de Marcelo
El mal ejemplo cunde. Aunque ayer Marcelo Ebrard rindió su informe ante la Asamblea Legislativa del DF y hoy rendirá oootro más en el Auditorio Nacional.
En el caso de Felipe Calderón, se entiende. Y es que en el 2006, apenas pudo entrar a la Cámara de Diputados a rendir protesta como presidente y eso, por la puerta de atrás.
Pero el caso del Jefe de Gobierno es diferente, porque el sí pudo asistir a la Cámara de Donceles.
Por eso no faltan aquellos que ven en esta “segunda función”, el arranque formal de la precampaña presidencial de Marcelo Ebrard rumbo al 2018.
Solo dos gobernadores asistieron al informe del que “sí hubiera sido el candidato que habría derrotado” a Enrique Peña Nieto.
Por Tabasco y Morelos pasaron lista de presencia los dos perredistas que resultaron gobernadores electos, Arturo Núñez y Graco Ramírez respectivamente.
Por lo que toca a los gobernadores en funciones, solamente asistieron el de Guerrero y el de Puebla. El neoperredista Ángel Rivero y el neo panista Rafael Moreno Valle.
La cifra contrasta con los 18 gobernadores que hace unos días asistieron al segundo informe del gobernador del Estado de México Eruviel Avila, quien a pesar de ser vecino de Marcelo Ebrard no asistió, como tampoco lo hicieron otros dos gobernadores vecinos de Hidalgo y Morelos.
¿Por qué sería?