Año con año, la Academia de la Artes y las Ciencias Cinematográficas hace su selección a modo de lo que considera lo mejor del año pasado, para premiarlo con el máximo galardón de la industria cinematográfica, el Oscar.
Y como siempre, hay largometrajes que quedan completamente ausentes de esta celebración, que bien podrían merecer también formar parte de las nominaciones, pero como los reflectores se fijan en aquellas que tienen mayor viralidad y publicidad, se olvida a un amplio porcentaje internacional y de producciones estadounidenses.
De entre los cientos de largometrajes que aspiraron a ser nominados por la Academia, podemos recordar al menos cinco producciones que llegaron a México en estreno comercial o de manera limitada, pero fueron olvidadas por el gremio fílmico.
Huérfanos de Brooklyn, cinta basada en el libro del mismo nombre de Jonathan Lethem, y que le tomó a Edward Norton 20 años realizar, que además actuó, dirigió, escribió y produjo, se quedó sin una sola mención, aunque haya tenido altos valores de producción, como su musicalización, el cuerpo actoral, la ambientación de época, entre otras.
El documental realizado con pietaje original de la NASA, Apollo 11, que además logró el aplauso de la crítica internacional y coincidió con el 50 aniversario del primer alunizaje, está fuera de los Oscar, solo logró la nominación de los BAFTA como Mejor Documental, pese a la labor exhaustiva de investigación del cineasta Todd Douglas Miller.
Danny Boyle, quien trajo en 2019 la película Yesterday, en la que da continuidad a su carrera de comedia y su peculiar estilo de humor negro, fue ignorado por la Academia, y vaya que el cineasta, después de Quisiera ser millonario (2008), se coronó como ninguno con las preseas a Mejor Director, Mejor Película y seis estatuillas más. Volvió a colarse a la premiación con 127 horas dos años después.
Otro cineasta olvidado es Terrence Malick, quien ha sido nominado en otras ocasiones en los nombramientos principales con La delgada linea roja (1998) y El árbol de la vida (2011), pero ahora con A hidden life, cinta en la que describe el momento histórico de la Segunda Guerra Mundial, vivido desde el punto de vista de un hombre objetor y es condenado a muerte, estuvo fuera de todas las premiaciones estadounidenses, pero al menos Malick cobró la presea François Chalais por su dirección en Cannes el año pasado.
La película El Faro sólo logró obtener la mención a Mejor Cinefotografía a Jarin Blaschke, pero ni su guión, dirección, diseño de producción, mezcla de sonido o actuaciones, pudieron obtener nominación al Oscar.