Ahora resulta que el senador panista Javier Lozano Alarcón le anda queriendo “dar cuello” a Gustavo Madero, por no cooperar para defender la imagen de los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón.
Y todo porque el presidente del PAN tuvo el valor de reconocer que los panistas no estuvieron a la altura de las demandas de la sociedad al haber protegido a la maestra Elba Esther Gordillo.
Según el exsecretario del Trabajo de Felipe Calderón, el PAN ya tiene suficientes críticos como para que ahora venga el presidente del PAN a criticar a los gobiernos de su partido.
Sin embargo, el senador Lozano, obsesionado por defender a Felipe Calderón, está viendo la paja en el ojo ajeno, sin ver la viga en el propio.
Y es que el poblano no ha tenido el menor empacho en criticar a quien está en todo su derecho de ejercer la autocrítica.
De que el Felipe Calderón se asoció con Elba Esther Gordillo no hay duda alguna. Por lo que nada malo hay en que los panistas expresen su “mea culpa” a todos los mexicanos.
Cálculo de riesgos
Aunque el procurador general de la República señaló que en la averiguación previa, que se “trajo” y “no atrajo” de Tabasco, no aparece el nombre de Andrés Granier, sino el de diversos funcionarios del gobierno del estado, posiblemente Jesús Murillo Karam tendrá que determinar la probable responsabilidad del exgobernador tabasqueño.
Si a estas alturas la PGR exonerara al gobernador Granier, el que pagaría los platos rotos sería Enrique Peña Nieto en el caso de que las autoridades de Tabasco le llegaran a fincar una probable responsabilidad al exgobernador.
Y es que no hay que olvidar que el exgobernador Granier también podría ser acusado ante el Ministerio Público de Tabasco y ante los jueces del Estado.
Si la envidia fuera roña
Haya sido como haya sido Hugo Chávez, muchos jefes de Estado habrían dado lo que fuera por tener una despedida tan tumultuosa como la que hoy tendrá el presidente venezolano.
Y es que homenajes como estos solo los han tenido en América personajes tan emblemáticos como John F. Kennedy, Franklin Delano Roosevelt, Néstor Kirchner, Juan Domingo Perón y Evita.
De ahí que a pesar de lo que ande diciendo el excanciller Castañeda, el consejo que el canciller José Meade le dio al presidente Peña Nieto fue de lo más acertado.
A las exequias de Chávez acudirán 30 jefes de Estado.
