¿Cuánto cuestan los hijos?
“Hacer” hijos es fácil… y a veces hasta divertido; mantenerlos, no. ¿Alguna vez por ociosidad has hecho cuentas de lo que cuesta la paternidad responsable? Poca gente es tan obsesiva –compulsiva– con los números (como yo) y se da a la tarea de contar con pesos y centavos lo que se gasta con la prole. […]
Gianco Abundiz“Hacer” hijos es fácil… y a veces hasta divertido; mantenerlos, no.
¿Alguna vez por ociosidad has hecho cuentas de lo que cuesta la paternidad responsable? Poca gente es tan obsesiva –compulsiva– con los números (como yo) y se da a la tarea de contar con pesos y centavos lo que se gasta con la prole. Y no es un tema de tacañería; ¡para nada! Simplemente es un ejercicio “presupuestal” para dimensionar el monto destinado a la manutención y crianza de nuestra descendencia.
Desde que se sospecha del embarazo y se practica una prueba rápida para después acudir a la consulta ginecológica y hasta que se gradúan de la universidad, ¿cuánto dinero se gasta en los hijos? Pasando obviamente por el pediatra, la comida, el vestido, la diversión, la escuela y todo lo demás que se te pueda ocurrir.
Aunque tengo hecho el cálculo para personas de clase media, no voy a entretenerme en dar las cifras. Lo que sí te puedo decir es que son muchos millones de pesos, cantidad que no sientes en realidad porque son muchos años los que te lleva el desembolso. Créeme, si tuvieras que “pagarlo” por anticipado, ¡nunca tendrías hijos!
Claramente lo más importante es lo humano, lo emocional y espiritual de formar una familia, pero es insoslayable que lo económico se ubica en primera línea. Por eso la pregunta obligada es ¿no deberíamos planear correctamente la llegada de los hijos?
He hablado y escrito durante décadas sobre establecer metas y objetivos financieros que permitan su realización en el corto, mediano y largo plazo. De esta manera es menos difícil salir avante en la batalla económica que casi todos los seres humanos tenemos.
No estoy diciendo que primero tengas dinero y luego hijos, pues cuando lo tengas, la madre naturaleza tal vez ya no te permita engendrar. Te pido que mantengas bien despierto el sentido de previsión sobre lo que quieres para los tuyos en cuanto al estilo y nivel de vida que les proporcionarás y que, por ende, te permita ofrecerles estabilidad financiera. Tampoco se trata de darles una vida regalada y llena de comodidades materiales, sino de que se crezca en la unidad familiar sin menoscabo de la cartera.
Todos sabemos que lo más importante de la vida es gratis, pero para todo lo demás se necesita dinero, y en el caso particular de lo plasmado en estas líneas, son cantidades muy grandes.
Si bien no todo debe ceñirse al mundo de los billetes, los grandes rubros de tener hijos sí se pueden programar para bien de toda la familia.
Recuerda que “No es más rico el que gana más, sino el que sabe gastar”.