Desde mi palco: MANOTAZO DEL “TATA” MARTINO

De entrada hacemos a un lado aquello de que “Se logró la revancha” en la victoria de nuestro TRI sobre la Selección de los Países Bajos (Holanda), en la mismísima Amsterdam por uno a cero que, coincidencia de aquella frustrante y dolorosa tarde en el mundial BRASIL 2014, cuando los nuestros ganaban, nos alcanzan, nos superan con aquel “No era penal”, con esta noche en la que le cometen falta en el área a Raúl Jiménez, por ahí dicen que “Raúl provoca el penalti”, pues entonces, ¡bien por Raúl!, como en aquel Mundial Arjen Robben vendió lo mismo, por supuesto es una gran victoria pero no tiene nada de revancha, esto solo podrá darse cuando nuestro TRI los deje tendidos en un Mundial y ahí sí, a festejar la revancha.

IGUAL QUE A LOS GRINGOS

Con ellos tenemos una rivalidad histórica, es un Clásico con todo lo que esto conlleva, los enfrentamos en todo torneo que Concacaf inventa, en eliminatorias Mundialistas, hasta en Copa América a la que ambos acudíamos en calidad de invitados y también en aquel Mundial Japón Corea 2002, en la Ciudad de Jeonju, Corea, ahí nos dejaron tendidos y frustrados como antes nos ocurrió en la Copa América de Uruguay 95, en ambas ocasiones la Selección de USA echó a nuestra Selección, aquí es igual, hasta que nuestra Selección supere a los de las “Barras y Estrellas” en un Mundial no hay forma de celebrar “revancha”, Holanda y USA, dos casos similares pero que siguen clavados en la sed revanchista futbolera.

MANOTAZO DEL “TATA” MARTINO

De entrada regresa a las bases, la Selección Nacional es para los mejores, no para experimentos, en ese nivel es indispensable llegar no solo a la convocatoria sino a ganarse un sitio en el cuadro titular o ya de última entrar de relevo y ya sobre el césped jugar con todo para superar en la competencia a los otros jugadores, el “Tata” Martino no es un técnico “quedabien”, eso lo padecimos con el “Profe” Juan Carlos Osorio y sus “mafufadas” de rotaciones -cambios – reinventar posiciones, y así mover al plantel en el que todos juegan casi sin competencia interna, nuestro técnico nacional impone su estilo sin reflectores ni aspavientos, sin declaraciones sensacionalistas, sin mensajes difusos, va de frente, selecciona a los mejores disponibles, evita confrontarse con los que se bajan del barco y convoca a los mejores, a los de jerarquía que “están listos” los respeta y apoya, como a Héctor Herrera y Andrés Guardado que han jugado muy poco en sus equipos, y lo mas importante, provoca convicción hacia lo que les pide el técnico en el grupo.

GRAN COMIENZO

Cierto que esto apenas comienza pero vaya arranque de nuestra Selección, victoria con autoridad en Amsterdam sobre una de las Selecciones más cotizadas del planeta, en una oportunidad única y quizá irrepetible en el corto plazo, rivales así serán muy difíciles de encontrar, así que, como aquella película, “Mejor, imposible”… así de fácil…