Algún tipo de acuerdo raro se debe haber dado entre la Arquidiócesis Primada de México, que preside el cardenal Norberto Rivera, y el partido del sol azteca, para criticar la recién aprobada Reforma Energética.
Y es que da la impresión que Los Chuchos del PRD se pusieron de acuerdo con el abogado del diablo, más que con el Espíritu Santo, para escribir la editorial de ayer del semanario Desde la fe.
Sin condenar la Reforma Energética, dice la editorial, está muy mal “que los contribuyentes barran la basura (de los pasivos laborales de Pemex) para justificar la excelencia de la empresa…”
Pasivos que se han acumulado, según el semanario, por “la opacidad, la falta de rendición de cuentas y, más grave, la corrupción porque un gremio, nacido de la lucha, abusó de sus derechos hasta comprometer el futuro de los trabajadores.”
¿Por qué nunca antes denunció la corrupción en Pemex el cardenal Norberto Rivera?
“No nos volverán a saquear”
Como una cuestión de mero trámite, los senadores de la República le pondrán hoy los últimos puntos y comas al proyecto de Reforma Energética.
Lo que por décadas fue tan solo una acariciada ambición para los grandes consorcios petroleros, mineros, gaseros y eléctricos, se convertirá en una posibilidad real de hacer grandes negocios con la extracción, transformación, distribución y venta de los recursos energéticos de México.
Con el tiempo sabremos qué tan afortunada fue esta decisión para la mayoría de los mexicanos.
Y si no se equivocaron los que dicen que bajará el precio del gas, la gasolina, la electricidad, y que ahora sí crecerá México, o si tendremos que volver a repetir aquella frase de López Portillo:
“Ya nos saquearon. No nos volverán a saquear.”
El Tucom de la izquierda
Tal parece que el jefe de gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera, y Jesús Ortega, se pusieron de acuerdo para iniciar una campaña en contra de Morena y de Andrés Manuel López Obrador.
Ahora resulta que para el coordinador general de la campaña de AMLO en el 2006, el tabasqueño tiene una “visión fanática, intolerante, populista, demagógica, anacrónica, a veces de un nacionalismo pernicioso, anclada en el pasado, viviendo en el siglo XIX”.
Mientras que el “ciudadano sin partido” Miguel Mancera, culpa a Morena de la división del voto de la izquierda, como si las izquierdas hubieran estado alguna vez unidas.
Todos contra Morena.