Hay quienes insisten en que detrás de la disputa por los 2.5 GHz, hay un conflicto de bandas con intereses políticos y económicos muy específicos.
Por un lado está la banda de Emilio Azcárraga, Ricardo Salinas Pliego, las telefónicas ajenas a Telmex y los cableros, apadrinados por Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
En la otra banda estarían Joaquín Vargas y Carlos Slim, defendidos por Andrés Manuel López Obrador y los progresistas de la izquierda.
Por eso el conflicto que se venía arrastrando desde hace dos años estalló precisamente ahora, pasada la elección presidencial y sabiendo quién sería el nuevo inquilino de Los Pinos.
El cuestionamiento de fondo es por qué Calderón decidió armar la disputa entre los titanes precisamente ahora, a tres y medio meses de terminar su sexenio, quitándole la concesión a MVS y a Joaquín Vargas.
El presidente podría haber librado el espinoso conflicto entre los titanes mediáticos y de telecomunicaciones lavándose las manos, heredando la papa caliente a su sucesor. Los tiempos no dieron.
Pero sobran quienes apuestan a que los peñanietistas les pidieron el favor a los calderonistas.
Y es que los del nuevo gobierno saben que si ellos entran en diciembre dando el golpe contra MVS –con rebote a favor de Televisa y asociados–, el hecho será visto como un pago a la campaña de pantalla que encumbró al mexiquense en las preferencias electorales.
Lo que no lleva a otra cosa que a pensar que en los acuerdos de transición entre los equipos de Calderón y Peña Nieto, ya están en el terreno de “límpiame tú la entrada que yo te cubriré la salida”.
Por lo pronto, Joaquín Vargas ya dejó en claro que cuidado con que los involucrados pretendan desmentir lo del chantaje, porque dará pruebas suficientes y contundentes que ratifiquen su dicho. ¡Tómala!
Dulce complot contra Borge
Quintana Roo es uno de los estados más prósperos de México. En medio de la crisis, los 13 millones de turistas que lo visitan anualmente lo convierten en un botín apetecible para cualquier político.
Quizá por ello, desde los cuarteles peñanietistas se estaría preparando un supuesto “ascenso” para el gobernador de esa entidad.
La tirada sería candidatear a Roberto Borge para la Secretaría de Turismo, lo que lo obligaría a pedir licencia como mandatario estatal.
Los promotores de la iniciativa son Pedro Joaquín Coldwell y Miguel Ángel Osorio Chong.
Si lograran la salida de Borge del gobierno, así sea dando la impresión de que “cae para arriba”, la entidad quedaría bajo su control.
No hay que olvidar que el todavía presidente nacional del PRI, senador por ese estado, miembro del equipo de transición de Peña Nieto y, sin duda, un personaje clave del próximo gabinete, ya fue gobernador de Quintana Roo.
¿Dejará el gobernador Borge que sus amigos le den el “ascenso” a Turismo?
‘La Barbie’, ‘El Indio’ y los generales
A ver, ¿cómo está eso de que ni “La Barbie” ni “El Indio”, los dos lugartenientes de los Beltrán Leyva, declararon que fueron detenidos por presuntos vínculos con ese cártel?
Y lo que es peor, que tampoco conocen a los testigos protegidos que bajo los nombres de “Jennifer” y “Mateo” denunciaron a los militares que ya fueron consignados y enviados a penales de alta seguridad.
Si así empieza el descargo de testigos, habrá que ver cómo le hace la PGR para sostener lo que desde la detención, al menos en el caso del general Tomás Ángeles, se ve insostenible.