Tremenda bomba la que logró ayer desactivar el Gobierno del Estado cuando pudo posponer la cancelación del servicio médico que ofrece el Hospital San José a los empleados y funcionarios estatales.
El Hospital San José –en una circular dirigida a los empleados estatales – advirtió que dejaría de prestar el servicio a partir del próximo 5 de agosto.
Esto a consecuencia del incumplimiento en el pago por parte de la empresa Medix y la aseguradora que brindan este servicio al Estado desde la administración pasada.
El problema no está resuelto, pero al menos la administración del gobernador Jaime Rodríguez ganó tiempo para poder negociar el adeudo que tienen con las empresas que prestan el servicio médico y estos a su vez con el Hospital San José que ronda por los mil millones de pesos.
¿De dónde sacará el Estado los millones de pesos para seguir manteniendo esta prestación para sus empleados?
Los temerarios del PAN
Muy buena medida la del grupo legislativo del PAN, que encabeza Arturo Salinas, de renunciar voluntariamente al fuero constitucional y proponer una iniciativa para eliminar esta garantía en Nuevo León.
Pero nos aseguran de la bancada que no todos los diputados panistas estaban muy convencidos en firmar esta iniciativa porque cargan con algunos pecados.
Por ejemplo: el legislador Marcos Mendoza, como secretario de Administración de la exalcaldesa Margarita Arellanes, firmó todos los contratos y autorizó los pagos por los cuales se le acusa penalmente a Arellanes.
No sería extraño que Mendoza fuera llamado a comparecer por la Fiscalía Anticorrupción.
No es el único.
José Luis Santos, como diputado federal y exalcalde de Lampazos, trae algunos asuntos pendientes por el tema de los moches.
Está el caso de Laura Paula López, quien cobró en el Municipio de Monterrey como coordinadora del Centro de Mediación de Monterrey prácticamente sin acudir a su centro de trabajo.
El diputado Sergio Pérez tiene cuentas pendientes en la Dirección de Deportes del Municipio de Monterrey, que están siendo investigadas por la actual administración municipal que encabeza el alcalde priista Adrián de la Garza.
Ahora sí como dice la canción… “Pero qué valor…”.
Cavazos y su compadre Barona
En el PRI de Nuevo León parece que las derrotas electorales no dejan ningún aprendizaje.
Hoy el dirigente estatal del PRI, César Cavazos, busca imponer a su compadre Carlos Barona como dirigente estatal de la CNOP, tras la renuncia del diputado Héctor García.
El perfil de Barona no es el mejor en este momento para dirigir al sector popular del PRI de Nuevo León: carga con el estigma de la derrota.
No sólo perdió el año pasado la alcaldía de García, en manos del independiente César Valdés, sino que en junio estuvo en Puebla donde el PRI fue arrasado en la elección por la gubernatura.
Sería un error de César Cavazos, dirigente estatal del PRI, si se encapricha en imponer a su compadre como líder de la CNOP de Nuevo León.
La última palabra la tendrá la senadora del PRI Cristina Díaz, quien es la secretaria general de la CNOP a nivel nacional.
