Medios nacionales e internacionales estaban pendientes de lo que ayer sucedería en la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Todos atentos a la posible aprobación del uso de la mariguana para fines lúdicos, recreativos, pues. Pero por sorpresa tomó a todos que esa discusión se pospuso una semana con el anuncio incluso de que el ministro Arturo Saldivar podría cambiar su ponencia en la que, como se hizo público, apoya el uso de la hierba. Con muchos a favor y muchos en contra, lo que sucederá en la Corte es una muestra de que en el País llegaron ya las discusiones urgentes, los temas que a nivel internacional han sido atendidos y solucionados. Todos los partidos han mostrados su disposición a que sea un tema que se lleve a debate, que se discutan los pros y los contras. Al menos en eso, partidos e instituciones de gobierno dan muestra de civilidad.
La bolsa presupuestal
En la Cámara de Diputados ya se están frotando las manos por la bolsa -¡qué bolsa, casi costal!- de recursos para 2016. Resulta que con las modificaciones que se hicieron a la Ley de Ingresos, quedará un remanente de recursos de 17 mil millones de pesos con el que algunos en la Cámara baja ya están pensando revivir los fondos para obras, aquellos de los que salían los famosos moches. En el Senado están tratando de que esta bolsa de dinero se utilice para el pago de deuda y no para fondos susceptibles de sufrir una merma antes de que lleguen a las comunidades y se queden en los bolsillos de quienes piden diezmos.
Peeeeeero quién sabe si todos aprueben la medida, porque por ahí dicen que los más reacios a eliminar los fondos para pavimentación, deporte y cultura son los panistas. Baste recordar que en años pasados las acusaciones de exigir moches a cambio de dinero para obras apuntaban hasta al coordinador de los diputados del blanquiazul, Luis Alberto Villarreal.
¡Aguas!
Pa´tras
En este espacio se lo adelantábamos: el tema de reducir el impuesto a las bebidas azucaradas sería muuuy polémico. Finalmente, ayer decidieron echar atrás la decisión de los diputados de reducir el impuesto a este tipo de bebidas. Lo curioso es que se da luego de una reunión que hubo por parte de empresarios refresqueros con la bancada de Acción Nacional. Las organizaciones de padres de familia y las que están a favor de una mejor alimentación de los niños deben estar felices porque lograron nuevamente una medida para contrarrestar el excesivo consumo de estas bebidas. Era previsible que esto, que los diputados tendrán que cargar a sus espaldas, fuera echado abajo.
