La amenaza de Calderón

Cada día hay más indicios que sugieren que Felipe Calderón estuvo directamente involucrado en el tráfico de influencias de permisos casineros. 

Esto se observa después de ver a la senadora Luisa María Calderón, ayer, acusando al gobierno de Enrique Peña Nieto de acoso a varios panistas calderonistas.

En su supuesta contraofensiva, dijo que el priista cambió la estrategia de seguridad del sexenio pasado, como si eso hubiese sido un error y no algo que exigían a gritos los mexicanos.

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Cada día hay más indicios que sugieren que Felipe Calderón estuvo directamente involucrado en el tráfico de influencias de permisos casineros. 

Esto se observa después de ver a la senadora Luisa María Calderón, ayer, acusando al gobierno de Enrique Peña Nieto de acoso a varios panistas calderonistas.

En su supuesta contraofensiva, dijo que el priista cambió la estrategia de seguridad del sexenio pasado, como si eso hubiese sido un error y no algo que exigían a gritos los mexicanos.

Que Peña Nieto debía seguir hablando todos los días de delincuencia organizada. 

Y que todo lo que propone el Pacto, ya lo venía haciendo su hermano. 

Por si esto fuera poco, acusó al gobierno de Enrique Peña Nieto de orquestar una campaña mediática en contra de los calderonistas a través de un “escalamiento de notas” –lo que eso quiera decir–.

Desafortunadamente para la señora Cocoa, quien al parecer también es una presunta involucrada en el tráfico de influencias casinero, el sol no se puede tapar con un dedo. 

El problema es que hay demasiados rastros. Demasiadas huellas. Demasiados indicios que apuntan hacia Felipe Calderón y sus amigos. 

Con todo y la presión de los senadores panistas del sector calderonista, el presidente Gustavo Madero se mantuvo firme y no la emprendió contra el Pacto, como lo hubiera querido la señora Calderón, quien por cierto, nunca ha dado ninguna explicación de cómo fue que Lizette Clavel llegó a ser su suplente para el senado, sin ser panista. 

“Habrán muchos cambios”

Aunque le dé mucho coraje a Cocoa y a su hermano Felipe Calderón, el secretario de Marina Vidal Franciso Soberón les dijo a un grupo de diputados federales que habrán muchos cambios en la estrategia de seguridad de este sexenio. 

Uno de ellos es que poco a poco se irán retirando los efectivos de las fuerzas armadas de las calles de las ciudades de México. 

¿Se atrevería Roberto Gil?

En un arrebato de aparente “valentía”, el senador Roberto Gil puso a disposición de su amigo y correligionario Ernesto Cordero, presidente de la Cámara de Senadores, la información de sus cuentas de cheques y haberes patrimoniales. 

Sin embargo, ¿se atrevería a hacer lo mismo el senador Gil con los medios de comunicación?

O por lo menos, ¿volvería a hacer pública su declaración patrimonial como lo hacía en los primeros años del gobierno? 

Comisión investigadora 

Aunque no se puede descalificar el acuerdo unánime de los partidos políticos para formar una Comisión Legislativa Investigadora del asunto de los casinos, lo cierto es que en los hechos esas comisiones no funcionan. 

Ahí está, por ejemplo, la Comisión Investigadora de los hijos de Marta.

A Manuel Bibriesca Sahagún no le pasó nada. Y Fernando, su hermano, ahora es hasta diputado del Panal de la Maestra,  por la vía plurinominal.

Panistas revisan estatus  

Juan de Dios Castro, consejero vitalicio del PAN, solicitó ayer de última hora incluir un punto en el orden del día de la sesión del Consejo Nacional albiazul que se llevará a cabo mañana en la Ciudad de México.

Castro busca que el CEN informe sobre el estatus de la denuncia que presentó el año pasado por la manipulación del padrón de panistas que habría promovido el exsenador de Durango, Rodolfo Dorador.

Uno de los implicados en esta denuncia es Iván Garza Téllez, exdirector del Registro Nacional de Miembros del PAN e incondicional de Zeferino Salgado, ex alcalde del Municipio de San Nicolás de los Garza.

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