Aunque no lo parezca, algo bueno han dejado las campañas en Tamaulipas. No todo ha sido lodo y guerra sucia. Los cierres de campaña han estado amenizados por grandes grupos musicales para que los tamaulipecos puedan al menos divertirse en bailes gratuitos.
Uno de los cierres del candidato del PAN a la gubernatura, Francisco García Cabeza de Vaca, estuvo amenizado por Intocable y por la Banda Limón. Gustavo Cárdenas, abanderado de Movimiento Ciudadano, contrató al cantante Espinoza Paz y al Grupo Pesado. El candidato del PRD, Jorge Valdez Vargas, llevó a La Sonora Dinamita y a Los Tigrillos para su cierre en Soto La Marina.
Algo ha quedado claro: allá se mueve mucho dinero.
Entre hermanos
Al interior de Movimiento Ciudadano hay varios que no están tan de acuerdo con que una de sus candidatas a la Asamblea Constituyente tenga ya un lugar asegurado en la historia de la Ciudad de México, a pesar de que tiene serios cuestionamientos en su contra.
Se trata de Esthela Damián Peralta, primer lugar en la lista plurinominal de constituyentes por ese partido. Resulta que su hermano, Alfonso Damián –quien actualmente es auditor general de Guerrero– fue acusado públicamente de asignar contratos de varios miles de millones de pesos, sin licitación, a la empresa Gruconsa, una de las favoritas del exgobernador precioso de Puebla, Mario Marín. Esto ocurrió cuando Alfonso Damián era subsecretario de Administración y Finanzas de la Secretaría de Educación de Guerrero en –ni más ni menos– el gobierno de Ángel Aguirre.
¿Y su hermana qué tiene que ver? En diarios de Guerrero, quedó testimonio de que Esthela Damián cabildeó con la bancada local del PRD para darle el voto a su hermano y que el Congreso lo nombrara auditor, desde donde podría operar para salvar de rendir cuentas a algunos funcionarios. ¿Será que cuando el río suena es porque agua lleva?
Cuentas claras
En el Instituto Nacional Electoral está a punto de vencer el plazo para que los candidatos que participarán en los comicios electorales del próximo domingo publiquen en línea el uso que han dado a los recursos que les fueron asignados… Se presume que menos de la mitad lo ha hecho, y el resto, tiene como fecha límite el sábado 4 de junio, de lo contrario, se harán acreedores de algo que a los partidos no les gusta para nada: ¡una espantosa sanción! O al menos con eso amenaza el INE, pero falta ver que se los cumpla.