“Trabajaba en una rosticería pero por la pandemia cerró. Yo trabajaba y él me decía que lo hacía para que los hombres me estuvieran viendo. Fueron 15 años de violencia física, económica, psicológica y sexual. Me sacó de la casa a machetazos, cuando él me golpeó me decía que era porque tenía un amante”, Yoselin.
Hoy ella se encuentra en refugio junto a sus hijos. El día que su esposo la corrió de su casa buscó ayuda para nunca regresar.
En México, la violencia intrafamiliar ha registrado sus peores índices en los últimos seis años, pero debido al confinamiento por la pandemia de COVID-19 y el desempleo en las mujeres, las cifras aumentaron.
Tan solo en mayo de 2021, se registró la cifra más alta en toda la historia del país con 23 mil 898 casos, lo que suma un total de 106 mil 603 casos en lo que va del año.
La Red Nacional de Refugios ha señalado que durante los primeros cinco meses de 2021, han sido asesinadas en México un millón 599 mujeres, de las cuales solo 412 delitos son investigados como feminicidios
Entre los testimonios retomados del trabajo especial que hizo la reportera Verónica Méndez para W Radio, está el de Cristina, quien hace un año, en plena pandemia, despertó en la cama de un hospital tras ser golpeada por su pareja hasta perder el conocimiento sin el bebé que esperaba.
“Me golpeó, me aventó, me golpeó en el vientre, cuando desperté estaba en un hospital privado, me dijeron que había perdido el producto. Yo les decía a las personas del hospital que no me dejaran con él pero no me decían nada. Les hacía señas de que quería hablar con ellas a solas porque él nunca me dejaba. Yo quería regresarme con mi familia”, platica.
Cristina estuvo incomunicada debido a que su pareja le quitó el celular y la computadora, hasta que pidió ayuda por medio de un recado a la chica que le llevaba el mandado. Una noche mientras su esposo dormía, escapó de la casa.
“Salí de la casa con el dinero que tenía, caminé, caminé y caminé, hasta que encontré una farmacia, les pedí que hablaran a la Red Nacional de Refugios, y bueno ya estoy aquí. Estoy ahora en una casa de transición después de estar en un refugio donde me dieron atención integral y me dijeron lo importante que yo era”, narra Cristina.
A un año de la pandemia se han abierto 603 carpetas de investigación al día por violencia intrafamiliar, 25 cada hora; 911 registró 689 mil 388 llamadas de emergencia, es decir, una cada 45 segundos.
Urge que el Estado atienda sin miramientos la violencia contra mujeres, niñas y adolescentes, no podemos ni debemos acostumbrarnos a la violencia de género y muchos menos a la muerte de mujeres, se les debe proteger y garantizar la vida y sus derechos.