Mexicano de a ‘billón’
¿Por qué Mark Zuckerberg escogería a un cineasta mexicano para marcar un antes y después audiovisual en la historia de la red social más influyente en el mundo?
Quizá pocos lo recuerden, seguramente los más jóvenes ni siquiera lo saben, pero "El negro", como lo conocen sus amigos y colaboradores, antes de convertirse en un aclamado cineasta, es un comunicólogo forjado en los pasillos de la creatividad publicitaria.
A mitad de los 80s, y al mismo tiempo que estudiaba la carrera en la Ibero, Inárritu trabajó en la mítica estación de radio WFM.
Juan Carlos Altamirano
¿Por qué Mark Zuckerberg escogería a un cineasta mexicano para marcar un antes y después audiovisual en la historia de la red social más influyente en el mundo?
Quizá pocos lo recuerden, seguramente los más jóvenes ni siquiera lo saben, pero “El negro”, como lo conocen sus amigos y colaboradores, antes de convertirse en un aclamado cineasta, es un comunicólogo forjado en los pasillos de la creatividad publicitaria.
A mitad de los 80s, y al mismo tiempo que estudiaba la carrera en la Ibero, Inárritu trabajó en la mítica estación de radio WFM.
De esta etapa se desprende uno de los momentos más emblemáticos para “El negro”, pues las ideas y emociones que llegan a la mente en imágenes, tenían que ser traducidas al lenguaje de la radio.
Ya como director de la estación y acompañado de un grupo de creativos, entre ellos Charo Fernández, González Iñárritu escribía, producía y locucionaba una de las páginas doradas de la radio juvenil en México.
En los 90s, Alejandro incursionó en lo que podría llamarse la agencia de publicidad interna de Televisa. El departamento de imagen y publicidad tenía como meta promover la ideología de la empresa a través de spots en sus distintos canales de TV.
¿Quién no recuerda irreverentes promos de Canal 5, que vinieron a romper una “cuadrada” tradición en la línea de producción publicitaria de la empresa de San Ángel o estupendos spots como el del día del padre?
Iñárritu comenzaba a mostrar de lo que podía ser capaz cuando le dejaban trabajar con libertad en una de los zonas narrativas que hoy le conocemos mejor, la cruda realidad y complejidad de las relaciones interpersonales.
Cuando Alejandro decide estudiar teatro y dirección actoral en Estados Unidos a mediados de los 90s, cierra un círculo que serviría como marco para que en un futuro no muy lejano (“Amores Perros”, 2000) presentaría piezas cinematográficas que, pueden o no gustar, pero sin duda marcan un estilo único en dirección y narración de historias.
En 2008, Alejandro González Iñárritu es contratado para realizar el video promocional de la Copa del Mundo 2010. Aquí hace su primer guiño con Facebook.
Después de que Ronaldinho “dibuja” una “bicicleta” a un contrario, aparece en la pantalla la emblemática mano de “like”. Cuatro segundos después, “El negro” incluye un screen de la página de la red social con un video que muestra a un grupo de fanáticos imitando la “bici” del crack brasileño.
El año pasado, González Iñárritu fue elegido para realizar otro trabajo comercial de gran aliento. El promocional de Procter & Gamble en el marco de los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Sin duda, su mejor trabajo publicitario hasta hoy.
Existen muchas razones para que Zuckerberg se haya decidido por nuestro paisano para dirigir “The things that connect us”, el video de 90 segundos en el que se ven a distintas personas en diferentes partes del mundo, compartiendo emociones de forma tan básica como cuando tocamos un timbre, nos sentamos, tomamos un avión y escuchamos música.
Felicidades a Facebook por sus mil millones y al “Negro” por ser un mexicano de a “billón”.