Oaxaca al rojo vivo

Si no estaba en el radar del Gobierno federal un problema por las elecciones en Oaxaca, seguro ya debe de estar. El robo y quema de material electoral enciende las alarmas. Los bloqueos a gasolineras y las constantes amenazas por parte de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) son ya un foco rojo a pesar de que en el INE sólo exista una preocupación superficial.

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Si no estaba en el radar del Gobierno federal un problema por las elecciones en Oaxaca, seguro ya debe de estar. El robo y quema de material electoral enciende las alarmas. Los bloqueos a gasolineras y las constantes amenazas por parte de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) son ya un foco rojo a pesar de que en el INE sólo exista una preocupación superficial.

Si bien todo apuntaba a que los problemas serían en estados azotados por el narcotráfico y la inseguridad como Guerrero o Michoacán, la verdad es que el problema ya se está dando –no se esperaron al día de la elección– en Oaxaca. Todos esperan una respuesta inmediata de las autoridades federales, pero también del máximo órgano electoral.

Recibo por donación

Francisco Rojas, el exalcalde de Tuxtla Gutiérrez, se siente difamado y acusa a este medio de que actuó con saña contra su persona. Asegura que mostrar el video en el que recibe un moche es actuar en contra de su proyecto político porque el dinero que le entregaron es una donación.

Lo que no menciona “Pacomoches” es dónde está el recibo fiscal que entregó al empresario por esa donación. ¿Está este dinero en la contabilidad de la organización no gubernamental que él preside y que hace brigadas médicas? ¿Por qué recibe las donaciones en lugares privados y se habla de dar obra pública a cambio y no de altruismo y brigadas de salud? A oídos necios…

Contra Uber

En medio de todo el relajo electoral los taxistas de la Ciudad de México se están organizando contra la empresa Uber. Han iniciado en México y quieren formar un movimiento a nivel nacional para impedir que la empresa –que labora a nivel internacional y que en todo el mundo ha provocado la molestia de los taxistas convencionales– ofrezca su servicio en el país.

No es un caso para desestimar. Si los taxistas se organizan se pueden convertir en una fuerza con la que nunca antes las autoridades se han tenido que enfrentar. No estamos seguros que una vez constituida en una organización nacional puedan vencer a Uber, de lo que sí estamos seguros es que más de un partido político irá a coquetearles porque en épocas como esta significarían votos y promoción.

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