¿Parteaguas?

Los que creen que la privatización de la explotación petrolera será la salvación económica de México, están tan equivocados como los que creen que si no exportamos un barril de petróleo, México no podría alcanzar una tasa alta y sostenida en el crecimiento económico.

Cuando México llegó a producir más de 4.5 millones  de barriles diarios de petróleo, José López Portillo dijo que teníamos que prepararnos para administrar la abundancia, pero terminamos mal administrando la pobreza. 

Redes de Poder Redes de Poder Publicado el
Comparte esta nota

Los que creen que la privatización de la explotación petrolera será la salvación económica de México, están tan equivocados como los que creen que si no exportamos un barril de petróleo, México no podría alcanzar una tasa alta y sostenida en el crecimiento económico.

Cuando México llegó a producir más de 4.5 millones  de barriles diarios de petróleo, José López Portillo dijo que teníamos que prepararnos para administrar la abundancia, pero terminamos mal administrando la pobreza. 

En cambio, a pesar de que durante el periodo del desarrollo estabilizador, México fue un importador neto de petróleo, el país creció a una tasa sostenida superior al 6 por ciento.

¿A qué le temen?

Está tan claro que la gran mayoría de diputados y senadores no representan al ciudadano, que ahora están muy preocupados en reglamentar la Consulta Nacional. 

Si la mayoría de los ciudadanos están de acuerdo en que se privatice la explotación del petróleo, no tendrían por qué estar tan preocupados de que la ciudadanía exprese su voluntad  en una Consulta Nacional. 

Uno de los que no confían en el buen juicio de Juan Pueblo es el presidente del PAN Gustavo Madero.

Tan es así, que el sobrino nieto de Francisco Madero anda diciendo a quien lo quiera escuchar que  la “política le vale madre a la sociedad mexicana”. 

¿Quién se la va a creer?

Dígale lo que le diga Genaro García Luna a la revista  Forbes, el hecho es que el exsecretario de Seguridad Publica de Felipe Calderón jamás ha podido demostrar que los ingresos que consignó en sus declaraciones  patrimoniales, mientras las hizo públicas, le alcanzaban  para comprar sus propiedades en territorio nacional. 

Mucho menos cómo fue que pudo hacer inversiones millonarias en Miami.

Incongruencias

Mientras la Secretaría de Hacienda promueve la utilización de la tarjeta de crédito o de débito como medio de pago, en el Museo Nacional de Antropología solo se acepten pagos en efectivo. 

Si el doctor Luis Videgaray insiste en que uno de los grandes problemas de México es su baja productividad, primero tendría que empezar por eficientar las prácticas del propio gobierno. 

El buen juez por su casa empieza.

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil