Después de no haber sesionado por dos semanas debido a las protestas de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, a unos días de irse de ‘descanso’ por Semana Santa y con un importante número de pendientes legislativos, a los diputados federales parece que no les va a quedar de otra que convocar a un periodo extraordinario. Los que están prácticamente obligados son los legisladores de Morena y sus aliados, si es que quieren seguir el ritmo transformador que pretende el presidente López Obrador, por lo que la resistencia podría venir desde los grupos parlamentarios opositores, quienes, nos comentan, no darán tan fácilmente su brazo a torcer, pues aunque estarían dispuestos a apoyar el extraordinario también pretenden que algunos de los temas de su agenda política puedan ser llevados a comisiones y al pleno y no únicamente lo que sea prioritario para el partido hegemónico. Al parecer ya hay una propuesta para sacar adelante la agenda del presidente en un extraordinario a cambio de dar entrada a las iniciativas de la oposición en el próximo periodo ordinario, pero como es natural, hay cierta desconfianza. Aún quedan algunos días para lograr el consenso. Veremos.
Zaldívar, aliado o contrapeso
El llamado del presidente Andrés Manuel López Obrador para limpiar el Poder Judicial no es nuevo, sin embargo al interior de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ya se empieza a percibir cierta tensión por lo que consideran un intento de presión por parte del Ejecutivo. Una cosa nos dicen, es que exista comunicación entre los poderes y otra muy distinta es un intento de injerencia en las decisiones propias que le corresponden a cada uno. La realidad es que desde su llegada, se ha notado un compromiso real del presidente de la Corte, Arturo Zaldívar, para erradicar la corrupción en el Judicial, además ha sabido sobrellevar de buena manera el nuevo equilibrio político. Pero, podría ser en los próximos meses cuando su temple sea puesto a prueba. De momento se mantiene la cordialidad entre poderes. Algo que se debe tener en cuenta es que Zaldívar puede ser un gran aliado en la lucha anticorrupción o bien uno de los contrapesos más visibles al régimen.
Cárdenas quiere marcar la agenda
En Puebla, en el arranque de la campaña para la elección extraordinaria a la gubernatura, el que ha sorprendido a la opinión pública es el candidato de la coalición PAN, PRD y MC Enrique Cárdenas. De entrada, al presentar su declaración “3 de 3”, ya les marcó la agenda al resto de los contrincantes, sobre todo al puntero Luis Miguel Barbosa, quienes ahora tendrán que responder al reto del exrector de la Universidad de las Américas. Es cierto, la contienda está muy cuesta arriba para Cárdenas, pero al menos de inicio demuestra que quiere vender cara la derrota.
