El Festival Internacional Cervantino (FIC) este año cumple medio siglo y se prevé que sea algo inolvidable, al menos en su costo, pues para la pura gestión de los documentos que se requieren y el diseño de la imagen institucional, la Secretaría de Cultura pagó a una empresa 705 mil pesos.
Llama la atención que la compañía que realiza el supuesto trabajo está en la calle de Amores, número 1807, interior 401, pero se trata de un departamento particular. La supuesta empresa se llama MAG Edición en Impresos y Digitales, S.C.
Esta misma empresa realizó en 2016 documentos relacionados con la Reforma Educativa para la SEP. Los editores fueron Gabino Flores Castro y María Ángeles González Salazar. Por cierto, sólo ésta última aparece como representante legal de MAG Edición en Impresos y Digitales S.C. en el contrato.
Ambos editores aparecen en el Registro Público de Comercio como dueños de una empresa denominada Lucidus Software Factory S. de R.L. de C.V., pero esta no aparece en el contrato del diseño del logo del Cervantino. En la fiesta de Cervantes todo indica que la palabra austeridad no está invitada.
Guerra dialéctica en el Senado
En la sesión ordinaria en el Senado de la República, el panista Víctor Fuentes se enojó y llamó “imbécil” e “idiota” al subsecretario Hugo López-Gatell por defender que no es necesaria la vacuna contra COVID-19 para los niños, recordándole que “los carniceros de hoy, serán las reses de mañana”, incluso, advirtió que interpondrá una denuncia penal para que, de aquí en adelante, le finquen responsabilidad al epidemiólogo por los niños que sufran contagio, ingresen al hospital o perezcan. Los calificativos molestaron a su colega de Morena, Margarita Valdez, quien le pidió decir lo mismo, pero con otras palabras. Entonces el dicho “al buen entendedor pocas palabras”, ¿en dónde queda?