Únicamente quedan tres sesiones antes de que concluya el periodo en el Senado de la República y los pendientes que tienen los legisladores no sólo siguen sin desahogarse, sino que ya se acumularon nuevos, por lo que el coordinador de Morena, Ricardo Monreal, ya transmitió el sentido de urgencia a su bancada para sacar los temas prioritarios, que no son otros que los de la agenda del presidente López Obrador. Los senadores tienen el tiempo encima para sacar, al menos, las leyes de Seguridad Nacional y del Banco de México, así como avalar las propuestas presidenciales para el Inegi y la Junta de Gobierno de Banxico.
Pierden oportunidad
La sesión presencial del día de ayer del Congreso de la Ciudad de México era la oportunidad para que se discutiera y aprobara la Ley de Infancias Trans, que lleva un año congelada y no ha visto la luz porque los lineamientos de las sesiones virtuales -implementadas por la contingencia sanitaria- no permiten que Morena aplique su mayoría en el órgano legislativo local y meta el tema en el orden del día. Ayer tuvieron oportunidad de madrugar al PAN -principal opositor a la ley- y meterla a discusión ya una vez iniciada la sesión presencial. Sin embargo, nos cuentan que no fue así porque la coordinación de Morena temía poner en riesgo el acuerdo con las diferentes bancadas para el nombramiento de los magistrados del Tribunal de Justicia Administrativa. El único de Morena que se acordó del tema fue Temístocles Villanueva, quién llevó su cubrebocas con los colores de la bandera de la comunidad trans para “recordar lo que el Congreso les debe”.
No quiere perder reflectores
Otro que tampoco está muy de acuerdo en una posible alianza panista con México Libre es el excandidato presidencial Ricardo Anaya, nos dicen. Además de las profundas diferencias que tiene con los Calderón Zavala, lo que más le preocupa, comentan, es que le quieran hacer “sombra” en su intento de posicionarse como el principal rostro opositor, que es el objetivo de su regreso a la vida pública.