Una revisión a la Cuenta Pública 2018 nos aporta datos reveladores acerca de posibles desfalcos en obras hidráulicas de gran calado. Esto no sería tan relevante si no fuera por el momento que estamos viviendo por la pandemia de Covid-19 que exige un grado alto de higiene y necesidad de agua para no adquirir el virus. Las observaciones de la ASF incluyen obras en el Estado de México como la construcción de las Lagunas de Regulación 1 y 2 en el municipio de Texcoco y la manutención del lago Nabor Carrillo. Además faltaron por concluir o tuvieron anomalías la construcción del colector de estiaje Chimalhuacán II, Tramos 1 y 2; la construcción del revestimiento del dren Chimalhuacán II; y el Túnel Churubusco-Xochiaca. No es equivocado pensar que algunas de estas obras del agua en el abandono y otras que van a paso de tortuga, sean catalizadores de lo que está pasando en el Valle de México, en donde se ha incrementado los casos de contagio de Covid-19. Hay que recordar que la acción principal contra el nuevo coronavirus es el lavado frecuente de manos.
‘Sana distancia’ entre partidos
Nos cuentan que hubo alguno que otro entusiasta, entre los dirigentes de los partidos de oposición, que comentó en lo bajo que la alianza PAN, PRI, MC y PRD en la Comisión Permanente para impedir un periodo extraordinario podría ser un primer paso para una gran coalición electoral rumbo a 2021, pero muy pronto sus compañeros de partido e integrantes de los demás institutos le bajaron los ánimos. La situación real es que Movimiento Ciudadano prácticamente no se plantea ninguna alianza electoral, ni tampoco el PRI (o lo que queda del tricolor); y lo único que está en el territorio de lo posible es una nueva coalición PAN-PRD, aunque para ello aún deberían ponerse de acuerdo al interior antes de siquiera pensar en entablar pláticas con potenciales aliados. Así que quien esperaba un gran bloque anti-4T en las próximas elecciones, seguirán esperando, pues siguen manteniendo su sana distancia.
