Este viernes se prevé que el Consejo General del INE apruebe el presupuesto para las elecciones del 2022, que incluyen seis comicios locales, una probable Consulta Popular —que se contempla se realice año con año y de no hacerlo se reintegraría el presupuesto a la Tesorería— y la Revocación de Mandato
Por supuesto, los consejeros del Instituto aseveran que tiene que hacerse “con toda la pulcritud a la que el INE nos tiene acostumbrados” porque es posible que México se quede sin presidente de un día para otro. En ese caso, la Revocación de Mandato tiene que tener el mismo peso que una elección presidencial. El presupuesto que el INE tiene proyectado indica que son 18 mil 827 millones de pesos para las seis elecciones locales, la (probable) Consulta Popular y la Revocación de Mandato.
Estos ejercicios ciudadanos tienen una dimensión diferente, eso es de lo que se hablará este viernes. Cada uno tendrá diferente metodología y, por lo tanto, diferente presupuesto. Elegir a un presidente no es lo mismo que ver si se quita o se mantiene. Tiene la misma importancia, pero no es igual.
Pacto de seguridad
La titular de la Fiscalía de la CDMX, Ernestina Godoy, firmó un acuerdo con las empresas que conforman la AMESP para dar capacitación al personal de seguridad
Está muy bien que en asuntos de esta naturaleza se convoque a una parte de la sociedad civil, pero también es fundamental que el propio Gobierno capacite a la policía, así como es primordial que exista colaboración con agencias de otros países.
En las capacitaciones y el intercambio de información, las agencias internaciones desconfían de las empresas de seguridad privada.
Y razones no les faltan. El convenio está en el entendido de una mejor colaboración, pero eso no exime a la Fiscalía local de insistir en la capacitación por cuenta propia.
Cero que ver
La organización Sí por México lanzó una crítica debido a que la violencia se metió, según su análisis, en las elecciones de junio pasado. Afirma que “un factor central en la definición de los resultados obtenidos en las urnas fue la intervención activa del crimen organizado”.
De paso, aplaudieron a la coalición legislativa Va por México (PAN, PRI y PRD) “por su iniciativa de presentar una denuncia sobre la intervención del narcotráfico en la elección del 6 de junio, y la complicidad del Gobierno federal en esa “conspiración”, ante la OEA y la CIDH.
El chiste –que lamentablemente no es chiste– se cuenta solo. No hace falta más que ver los desastres que han dejado esos partidos a su paso por los gobiernos, es una historia conocida. Y, de paso, el raspón es para el INE, que tanto se ha desgastado en explicar que la violencia que incide en las elecciones no es responsabilidad del propio Instituto. A veces de llevar agua al molino se termina haciendo charco.
