Al parecer el boquete de los permisos de los casinos es tan grande que el buque del panismo-calderonista se sigue hundiendo sin remedio.
Cada vez que los involucrados, como Roberto Gil, o Lizette Clavel, han intentado salir a flote tratando de descalificar a su acusadora, se hunden más.
Al senador Gil en nada le ha ayudado mostrar su conocimiento sobre el curso que sigue el proceso penal en contra de Juan Iván Peña Neder para descalificar a Talía Vázquez, si al final su acusadora siempre pone en evidencia que el senador está mal informado.
Tampoco funcionó la estrategia de sacar al ruedo a Lizette, suplente de la senadora María Luisa Calderón, si después de cada entrevista la gente termina más y más convencida de que la exlíder de las aeromozas está mintiendo.
Por ejemplo, insiste en decir que no sabe ni cómo llegó a senadora plurinominal suplente por el PAN, así como por qué contrató al despacho jurídico de Peña Neder.
Mar de fondo
Más allá de que quedó suficientemente claro que en los últimos minutos de la administración calderonista se otorgaron decenas de permisos irregulares a casinos, todavía no se aclara el por qué Juan Iván Peña Nader fue a dar en el 2007 a la Secretaría de Gobernación como asesor del subsecretario panista calderonista Abraham González.
Sobre todo porque después de haber andado en la operación de las redes de López Obrador en las elecciones del 2006, Peña Neder consignó en su declaración patrimonial haber fungido como Coordinador Nacional de Estrategia del Panal de la maestra Gordillo, de febrero a mayo del 2007.
¿Qué no fue la lideresa sindical la que le dio un empujón a Felipe Calderón para que ganara por el .56 por ciento?
¿Quiénes fueron los contactos con la izquierda que pidieron la contratación de Neder a los que se refiere Roberto Gil?
La ruptura del otro pacto
Lo que al principio fue interpretado como un “coscorrón pactado” entre Enrique Peña Nieto y La Maestra, para sacar adelante la Reforma Educativa, ahora parece haber evolucionado y amenaza en convertirse en un problema serio para el gobierno de Peña Nieto.
Por lo pronto, es probable que esta semana se presente un mega amparo colectivo promovido por el SNTE.
Cacería de perros
Después del caso de los detenidos y liberados por los disturbios del 1 de diciembre en el DF, el misterioso asesinato de tres jóvenes, una mujer y un bebé, por una presunta jauría de perros, es otra prueba difícil para el exprocurador Mancera.
Y es que ni en un caso, ni en el otro, las autoridades capitalinas han logrado dar con los responsables.
En el caso de los perros, por más que se dieron instrucciones a la policía para que fuera detenido y arraigado cualquier perro sospechoso, ninguno de los 54 canes detenidos ladró el delito.
De ahí que ante la falta de pruebas que incriminen a los 54 perros sospechosos, –algunos dicen que son 57– las autoridades capitalinas analizan la posibilidad de soltarlos y posponer para mejor ocasión la presentación pública de los perros expiatorios, tal y como lo solían hacer frecuentemente Genaro García Luna y el “pollo” Luis Cárdenas Palomino.
Sucedió igual que con la intervención de Amnistía Internacional en el caso de los detenidos del 1 de diciembre, pero en el caso de los perros el desprestigio de la policía capitalina ya provocó la intervención de ONGs internacionales que exigen que se detenga “la cacería de brujas”, o sea de perros.
Con esto y con lo del conflicto por la estatua del dictador de Azerbayan, el “secretario de Relaciones Exteriores del DF” ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, ahora sí tendrá trabajo por lo menos para las siguientes dos semanas.
Esperamos que no pida a los embajadores y a los cónsules que hablen bien del gobierno del DF y mal de los perros.
