Termina el cachondeo

Fue una espantosa vergüenza auspiciada por la Femexfut el armar una Selección (hay que llamarle de alguna forma) con la absurda iniciativa de llamar jugadores de relleno, jóvenes y alternos para cumplir con los 6 compromisos pactados para el segundo semestre del año pasado, un equipo sin pies ni cabeza, sin punch. Nos aplastó Uruguay 1-4, Estados Unidos 0-1, Chile 1-0, por ahí un triunfo apurado de 1-0 sobre Costa Rica, para luego viajar a Argentina en doble cotejo improvisado y sin interés del público local, dos derrotas de 0-2 cada una, si en el Mundial nos quedamos en el agua tibia de la mediocridad, estos partidos nos exhibieron hasta la pena ajena.

“TUCA” FUE CÓMPLICE

Después de ese espantoso cachondeo en que se convirtió nuestra Selección después de Rusia, arrastrando con su propia complacencia el prestigio bien ganado de Ricardo “Tuca” Ferretti a quien le negaron los jugadores de nivel incluso en fechas FIFA, inventando ese cuento absurdo de que el Tri iniciaba reestructuración con objetivo, ya no del Mundial Qatar 2022, sino el del 2026 llega la nueva etapa, la que dicen es la buena.

MEMORIA FLACA

Entregarle al “Tuca” la Selección en esas condiciones fue un bofetón para quienes muchos consideramos era el técnico idóneo para ungirlo como nuestro director Técnico Nacional hasta Qatar 2022, lo mandaron literalmente a la guerra sin fusil, la Femexfut se llenó de dólares, a “Tuca” le pagaron bien y en su regreso a Tigres volvió a ponerlos allá en la cima de nuestro fut como ya es merecida costumbre, y la espantosa vergüenza se pasó al cajón de los olvidos y cada quien su golpe.

“TATA” MARTINO

Con los conflictos cotidianos alrededor del Tri, muchos extra cancha, arranca la nueva etapa con el “Tata” Martino al timón con un estilo, resultados y sistema totalmente opuesto, a Dios gracias, al de su predecesor Juan Carlos Osorio que se vendió muy bien, se creyó el “Mourinho” de América, engañó hasta a los que lo trajeron esperando la oferta grande que nunca llegó, se fue de reintegro a Paraguay y hoy vive en el desempleo.

Martino tiene los blasones y las herramientas para respetar y hacerse respetar, sabe del oficio y de las intrigas palaciegas, hoy comienza su ciclo y que sea sin excusas, que la cancha hable, lo demás son “peanuts”… así de fácil…