J.J. Abrams, director del episodio IX de Star Wars, el último de la nueva trilogía producida por Disney, dio a conocer que la actriz Carrie Fisher, fallecida en 2016, aparecerá en la producción como la Princesa Leia, el legendario personaje al que dio vida desde la primera cinta de la saga: Una Nueva Esperanza.
De esta manera el realizador confirmó que ninguna actriz sustituirá a Fisher, y que la actriz no será recreada por computadora; para lograr los planes, se utilizará material que fue descartado en la edición final del episodio VII, El Despertar de la Fuerza, estrenado en 2015.
Los detalles fueron confirmados en una nota de prensa de Disney: Amamos desesperadamente a Carrie Fisher”, declaró J.J. Abrams, “Encontrar una conclusión verdaderamente satisfactoria para la saga Skywalker sin ella era imposible. Nunca íbamos a elegir otra actriz o usar a un personaje con recreación digital”.
El director señaló que para su propósito, la producción cuenta con “el apoyo la bendición” de la hija de Carrie Fisher, Billie Lourd, quien da vida a la teniente Connix en Star Wars.
LOS MUERTOS VUELVEN A LA VIDA
Otro dato que sorprendió a fans fue el fichaje de Mark Hammil en el papel de Luke Skywalker, y es que el final del episodio VIII: Los últimos Jedi, parecía mostrarnos la muerte del hijo de Darth Vader.
A pesar de haber estado alejado durante varios años de la historia, Billy Dee Williams también volverá como el contrabandista Lindo Calrissian, uno de los viejos amigos de Han Solo, fallecido en la parte VII, al ser atacado por su propio hijo, Kylo Ren.
La próxima película de Star Wars comenzará a grabarse en agosto, en los estudios Pinewood, de Londres, Inglaterra.