Baz Luhrmann “revive” a “El rey del rock & roll” y cuenta cómo fue filmar la película “Elvis”
La esperada película Elvis, que cuenta la vida de éxito del cantante estadounidense, llega a México. Su director Baz Luhrmann platica, en entrevista, cómo fue el proceso de hacer este largometraje que está triunfando en las opiniones de cinéfilos y crítica especializada
Hidalgo NeiraElvis es un nombre que hace eco en cualquier parte del mundo, incluso, en aquellas generaciones que ni siquiera crecieron escuchando su música, pero que, al menos, tienen la idea de que era un personaje, con un peinado de copete, que vestía de pantalones acampanados y fue el furor de sus abuelos, padres y millones de personas más alrededor del mundo.
Contar la vida de Elvis Prestley, desde un punto de vista cinematográfico, parecería una tarea sencilla, porque todo ha sido dicho acerca de “El rey del rock & roll”; sin embargo, el cineasta australiano Baz Luhrmann se dio a la tarea de ir más allá y enfocarse en una persona relativamente desconocida para el ojo común, pero que estuvo a la sombra del músico, durante toda su vida profesional.
En entrevista con Reporte Índigo, Luhrmann contó cómo fue el proceso para involucrar a Hanks en este papel, que, dicho sea de paso, el histrión confió completamente en el director, sin siquiera ver el guión.
“Fui y visité a Tom, a quien conocía un poco socialmente, en su oficina de su casa productora Playtone, y le hablé sobre el Coronel, y fue muy atento. Tenía un video y toda esta utilería para mostrarle la forma en la que voy a hacer la película, y tenía, incluso, material fílmico del Coronel, y alrededor de 40 minutos después dijo: ‘Bueno, si me quieres, yo le entro’. Ni siquiera tuve la oportunidad de mostrarle el video. Creo que les dije a los muchachos que estaban conmigo ‘creo que acaba de decir que sí, ¿verdad? ¿Simplemente dijo que sí?’”, agrega el también productor.
Parker es el narrador que nos lleva de manera vertiginosa y acelerada al inicio del filme, para después conocer a nuestro protagonista, Elvis Presley, un joven modesto, tímido y de familia, pero que tiene toda la voluntad para lograr el éxito en la música; Luhrmann recuerda que encontró a su “rey del rock & roll” en Austin Butler, gracias a que el artista envió una cinta amateur de él cantando y tocando a piano “Unchained Melody”.
Además, luego recibió una llamada telefónica, nada más y nada menos que de Denzel Washington, avalando y respaldando a Butler, porque habían trabajado juntos en la obra de teatro The Iceman Cometh (1939), del dramaturgo Eugene O’Neill.
“Entonces, desde el momento en que Austin entró, lo entrené y entrené y entrené, porque sí podía interpretar al joven Elvis, pero ¿podría interpretar al Elvis mayor? ¿Tenía la resistencia que iba a ser necesaria para lograr el papel? Luego, simplemente, pasó con gran éxito. Pero también creo, y lo digo con sinceridad, que las almas de Austin y Elvis se alinean un poco, de alguna manera. Hay una empatía y una vulnerabilidad similares”, dice.
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Actualmente, esta producción tiene un ranking del 77 por ciento de aprobación en el sitio Rotten Tomatoes, por parte de la prensa especializada, que también le otorgó el título “Certificación fresca”; mientras que el público general le otorga un 94 por ciento de 100 como aprobado, siendo más de cinco mil personas las que han opinado al respecto.
Impulsa el potencial del reparto en Elvis
Para Baz Luhrmann no era suficiente que el actor Austin Butler pudiera cantar, moverse o parecerse a Elvis, con su interpretación de “Unchained Melody”, lo que importaba era hacer una relación de equipo, encontrar el balance correcto para que “El Rey” se viera en pantalla y trascendiera más allá de ella.
“Creo que es un privilegio y una oportunidad que cualquiera que haya entrado por mi puerta pueda aprender algo sobre el texto del guión trabajando con ellos, esto es algo que de otra manera podría no haber visto en esas personas. Entonces, es un toma y daca, una colaboración, por así decirlo. Los talleres pueden incluir regresar tres veces, cantar e, incluso, disfrazarse. Quiero decir, a muchas personas las peinaremos y maquillaremos muy pronto.
“Es un proceso minucioso y lo considero un privilegio, porque puedo aprender sobre el guión, pero también puedo conocer a los actores en su camino. Quiero decir, los actores desconocidos que audicionaron para Romeo + Juliet (1996) son algunos de los más famosos del mundo ahora. Llego a formar relaciones. Así que funciona de las dos formas”, explica el cineasta.
En el caso de Hanks, Luhrmann quería quitarle ese halo de buena persona y actor preferido que tiene ante la imagen pública y buscaba en él un antagonista, que tuviera un enigma ante los espectadores y fueran descubriendo su mente maquiavélica conforme el mismo Elvis lo reconoce.
“El Coronel era una persona exagerada y realmente succionaba el aire de cualquier habitación a la que entraba. Tom se lanzó a eso, interpretando a este tipo complejo que era más que un sinvergüenza, sino también un manipulador y una persona complicada, a falta de una mejor expresión, no muy buena”, agrega el director.
‘Esto no es una película biográfica’
Baz Luhrmann tenía claro lo que buscaba hacer con su único estilo cinematográfico, quería alejarse de los largometrajes inspirados en hechos reales o aquellos que tienen un corte clásico biográfico; él iba por irrumpir en todo sentido y contar la vida de Elvis a su manera.
“Bueno, no quería hacer algunas cosas. Uno, una película biográfica, esto no es una película biográfica. Dos, no quería que se sintiera nostálgico. Y tres, sólo quería contar esta historia épica. La historia épica realmente trata sobre Estados Unidos en los años 50, 60 y 70 y sobre estos dos grandes gestos, que son la venta y el espectáculo”, comparte el artista en entrevista.
Algo que subrayó el cineasta en su filme fue cómo Elvis era un artista que venía desde abajo, escuchando música gospel y country. Luhrmann sabía que esto no podía omitirse de la narrativa fílmica, tenía que aparecer y hacerse presente para tener un contexto realista de cómo era el racismo en Estados Unidos.
“No puedes contar esa historia si no tratas el tema de la raza, particularmente, si estás haciendo música. Ahora, creo que Elvis está en el centro de la cultura de lo bueno, lo malo y lo feo de los años 50, 60 y 70. Este joven, por un tiempo, vive de niño con su madre en una de las pocas casas designadas para blancos en una comunidad negra. Pasé un tiempo en Memphis y, finalmente, después de un largo período, logré localizar a un hombre mayor afroamericano, Sam Bell, quien acababa de fallecer el año pasado, pero que, junto con otros jóvenes, salía con Elvis cuando eran niños”, argumenta el realizador.