El mejor amigo del hombre. La relación entre un perro y un humano es incomparable y tan fuerte como la de cualquier amistad entre personas.
Y así lo demuestra la película de origen húngaro-alemán “Buscando a Hagen”, ganadora del Un Certain Regard en el Festival de Cannes 2014. La historia está basada en la obra ganadora del Nobel de Literatura “Desgracia”, de J.M. Coetzee.
La trama gira en torno a Hagen y su dueña Lili, quien vive con su padre. Pero tener a Hagen (que no es de raza pura), representa un problema legal –y el pago de un impuesto–, por lo que su padre se deshace del can.
Por lo que Lili no se da por vencida y busca a su fiel amigo canino.
Para la cinta dirigida por Kornél Mundruczó se entrenaron a 200 perros que fungieron como actores “secundarios”, y quienes pertenecían a una perrera.
Dentro de la historia del largometraje que llegó a México este fin de semana, el amor y la amistad que unen a Lili y Hagen es más fuerte que cualquier cosa, y en la vida real ese amor traspasó las fronteras de la pantalla, pues los 200 perros “actores” encontraron un hogar después del rodaje.
La producción puso en práctica un programa de adopción que resultó ser eficaz para los 200 canes cuyo entrenamiento y aparición a cuadro es todo un espectáculo visual, pues el director hizo su labor tal como si se tratara con humanos en escena.
Paciencia, cariño y empeño predominaron en la realización de esta película cuyos canes fueron galardonados con el Palm Dog Award.
El filme tiene una duración de 119 minutos y enaltece –dentro y fuera de la pantalla– una de las características principales de los perros: la nobleza.
> Trailer de ‘Buscando a Hagen’
Basada en el Nobel de Literatura de J.M. Coetzee, “Desgracia”: