Del Toro, ‘El Rey’ mexicano del cine en Francia
Del Toro se convirtió en el primer mexicano en develar un placa con su nombre a un par de metros del lugar donde se inventó el cinematógrafo de los Hermanos Lumiere
Indigo StaffEn reconocimiento su carrera en el mundo del cine, el director mexicano Guillermo del Toro develó un placa con su nombre en el emblemático ‘muro de los cineastas’ de la Casa de los Hermanos Lumiere en Lyon, Francia, lo que lo convirtió en el primer mexicano en tener dicho reconocimiento.
Durante la inauguración del Festival de Cine de Lyon, Del Toro tomó el micrófono y cantó una de las canciones más populares de la música mexicana, ‘El Rey’ de José Alfredo Jiménez, la grabación del momento fue compartida por el cineasta Alfonso Cuarón en su Instagram.
“Merci beaucoup” (muchas gracias), declaró brevemente del Toro al develar la placa en el célebre muro ubicado a escasos metros del lugar en el que se rodó la primera escena del cine y en el que cuelgan más de 170 placas de cobre con el nombre de grandes cineastas y actores de la historia del séptimo arte.
El director de “El laberinto del fauno” estuvo acompañado en el acto por el director del Instituto Lumiere y delegado general del Festival de Cannes, Thierry Frémaux, además de por el gran director galo Bertrand Tavernier, la actriz española Marisa Paredes y el compositor francés Alexandre Desplat, entre otros.
Del Toro es el primer director mexicano en contar con una placa en el simbólico lugar, ubicado en el jardín de la casa de los hermanos Lumiere, que en 1895 proyectaron la primera película de la historia.
El acto tuvo lugar en el marco del noveno festival Lumiere que realiza una retrospectiva del cine de Guillermo del Toro y un ciclo de sus películas favoritas y en el que también participa activamente el gran director mexicano y amigo de del Toro, Alfonso Cuarón.
Los dos asistieron a la inauguración multitudinaria del certamen acompañados del director español Juan Antonio Bayona y el actor francés Vincent Lindon.
La ceremonia, a la que asistieron miles de personas, contó con la animación de un mariachi en honor de los dos realizadores mexicanos. Del Toro se arrancó durante la fiesta y la cena y cantó “El rey” con el mariachi, entre otras canciones.
“La presencia mexicana es una presencia de amistad y complicidad con Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro y de decir la importancia que tiene el cine mexicano”, comentó el director del festival y delegado de Cannes, Thierry Frémaux, fundador del festival.
Del Toro concluirá este lunes su participación en el festival francés ofreciendo una clase magistral para la que se agotaron las entradas.
Durante los últimos tres días, presentó cuatro de sus películas y varias de sus favoritas en el festival, que no tiene sección de competencia, y exhibe cada otoño en la ciudad del Ródano películas míticas de la historia del cine.
Ayer domingo, el director tapatío presentó el preestreno en Francia de su última película “La forma del agua” con la que ganó el León de Oro del pasado festival de cine de Venecia, uno de los principales premios de toda su carrera.
De su lado, Alfonso Cuarón presentó “El laberinto del fauno”, el largometraje más reconocido de su amigo Del Toro, y también el mediometraje mexicano experimental de 1964 “La Fórmula Secreta”, también conocida como “Coca cola en la sangre”, del director Rubén Gámez.
La película más taquillera y premiada de Cuarón ”Gravedad”, con la que el realizador recibió el Óscar a la mejor dirección, fue exhibida además en un ciclo de películas sobre el espacio programado por el certamen.
“Merci beaucoup” (muchas gracias), declaró brevemente del Toro al develar la placa en el célebre muro ubicado a escasos metros del lugar en el que se rodó la primera escena del cine y en el que cuelgan más de 170 placas de cobre con el nombre de grandes cineastas y actores de la historia del séptimo arte.
El director de “El laberinto del fauno” estuvo acompañado en el acto por el director del Instituto Lumiere y delegado general del Festival de Cannes, Thierry Frémaux, además de por el gran director galo Bertrand Tavernier, la actriz española Marisa Paredes y el compositor francés Alexandre Desplat, entre otros.
“Estoy muy feliz. Es muy bonito el recibimiento de Lyon que es la cuna del cine, es como ir a Belén, al nacimiento de algo hermoso, mágico, espiritual. El público es estupendo. Me siento entre amigos”, declaró del Toro a Radio Francia Internacional (RFI).
Del Toro es el primer director mexicano en contar con una placa en el simbólico lugar, ubicado en el jardín de la casa de los hermanos Lumiere, que en 1895 proyectaron la primera película de la historia.
El acto tuvo lugar en el marco del noveno festival Lumiere que realiza una retrospectiva del cine de Guillermo del Toro y un ciclo de sus películas favoritas y en el que también participa activamente el gran director mexicano y amigo de del Toro, Alfonso Cuarón.
Los dos asistieron a la inauguración multitudinaria del certamen acompañados del director español Juan Antonio Bayona y el actor francés Vincent Lindon.
La ceremonia, a la que asistieron miles de personas, contó con la animación de un mariachi en honor de los dos realizadores mexicanos. Del Toro se arrancó durante la fiesta y la cena y cantó “El rey” con el mariachi, entre otras canciones.
“La presencia mexicana es una presencia de amistad y complicidad con Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro y de decir la importancia que tiene el cine mexicano”, comentó el director del festival y delegado de Cannes, Thierry Frémaux, fundador del festival.
Del Toro concluirá este lunes su participación en el festival francés ofreciendo una clase magistral para la que se agotaron las entradas.
Durante los últimos tres días, presentó cuatro de sus películas y varias de sus favoritas en el festival, que no tiene sección de competencia, y exhibe cada otoño en la ciudad del Ródano películas míticas de la historia del cine.
Ayer domingo, el director tapatío presentó el preestreno en Francia de su última película “La forma del agua” con la que ganó el León de Oro del pasado festival de cine de Venecia, uno de los principales premios de toda su carrera.
De su lado, Alfonso Cuarón presentó “El laberinto del fauno”, el largometraje más reconocido de su amigo Del Toro, y también el mediometraje mexicano experimental de 1964 “La Fórmula Secreta”, también conocida como “Coca cola en la sangre”, del director Rubén Gámez.
La película más taquillera y premiada de Cuarón ”Gravedad”, con la que el realizador recibió el Óscar a la mejor dirección, fue exhibida además en un ciclo de películas sobre el espacio programado por el certamen.