El ADN de Ayotzinapa

Muchas preguntas, pocas respuestas. Con la frase “vivos se los llevaron y vivos los queremos”, los ciudadanos del país no han dejado de protestar contra el gobierno mexicano por la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa.

Esta semana, en entrevista para MVS Noticias, el padre Alejandro Solalinde, quien se ha convertido en un referente sobre el caso de los normalistas desaparecidos el pasado 26 de septiembre en Iguala, exhortó al auditorio a no bajar la guardia y continuar con la misma exigencia: “vivos se los llevaron y vivos los tienen que entregar”.

 Hasta ahora, el esclarecimiento de esta incógnita está en manos de la ciencia forense que se gesta en Austria, específicamente en el Laboratorio Central de ADN, que forma parte del Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Innsbruck, en dicho país. 

Es precisamente ahí donde los presuntos restos óseos de los normalistas serán objeto un tipo de prueba de ADN para el análisis forense de la que el propio laboratorio es pionero en protocolos de investigación desde su inicio, en 1997: el ADN mitocondrial (ADNmt), particularmente útil en el análisis forense de material dañado o degradado.

Hay que recordar que, según declaraciones del Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, los restos humanos hallados en Cocula presentan “un alto nivel de degradación”, producto del fuego que prendieron presuntos integrantes de Guerreros Unidos a un grupo de al menos 40 personas. 

Los huesos calcinados fueron fracturados, guardados en bolsas de plástico y arrojados al Río San Juan, en Cocula. 

Aunque Karam informó que el equipo de forenses austriacos determinó que solo dos huesos, “una rótula y otro pedazo”, podrían ser candidatos a las pruebas de ADN para identificar a los 43 normalistas. 

¿Que es el ADNmt?

El ADN mitocondrial se hereda únicamente de la madre. Se trata de una cadena circular de genes que, a diferencia del ADN nuclear –que se encuentra en el núcleo de las células y contiene el mapa genético completo de un ser humano, conformado por 23 pares de cromosomas–, se almacenan en orgánulos (o formaciones ubicadas fuera del núcleo) llamados mitocondrias, responsables de generar la energía que requiere cada célula del ser humano.  

Según un análisis sobre la práctica actual del ADN mitocondrial forense publicado por la compañía de investigación en pruebas de ADNmt Mitotyping Technologies, son dos ventajas las que ofrecen las pruebas forenses de ADNmt por encima de las de ADN nuclear: miles de copias de ADNmt están presentes en una célula, en comparación con dos copias de ADN en el núcleo celular. 

Y un mayor número de copias por célula en el ADNmt aumenta las probabilidades de recuperar más ADN de los restos para su estudio forense. 

Incluso de muestras biológicas de tamaño pequeño o que hayan sido seriamente deterioradas por el medio ambiente, sean huesos, cabello, piel, sangre u otros fluidos corporales. De hecho, se puede realizar un estudio de ADN mitocondrial de un solo fragmento de pelo cortado, sin raíz.

Otra ventaja es que, dado que el ADNmt solo se transmite por vía materna, cualquier pariente de la madre, por más distante que sea el linaje genético, podría servir de referente para compararse con el material biológico analizado.

Como explicó a Animal Político el Dr. Vladimir Cachón, profesor de genética y evolución de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México, “el ADN que está en el núcleo proviene una mitad del papá y una mitad de la mamá. En cambio, el ADN que está en la mitocondria solamente viene del lado de la madre porque las mitocondrias que tenemos todos en nuestras células solamente se heredan en el óvulo”.

“Es mucho más fácil hacer una prueba de ADN mitocondrial para establecer una relación de parentesco siempre y cuando se tenga una muestra del lado de la familia materna. El ADN de la mitocondria del hijo va a ser idéntico a la de la mamá”. 

Respecto al análisis forense específico de los supuestos restos óseos de los normalistas, el especialista dijo que “es muy difícil recuperar ADN en el estado en el que están esos restos. ADN de cualquier tipo va a ser difícil, pero en cada célula hay una sola muestra de ADN nuclear, hay un solo núcleo y puede haber cientos de mitocondrias. Simplemente por probabilidad si en esos restos algo sobrevivió de ADN va a ser mucho más probable que sea de una de las cientos de mitocondrias que hay en cada célula”.

¿Por qué Austria?

El Laboratorio Central de ADN de Austria forma parte del Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Innsbruck, pionero en los protocolos de investigación de ADN mitocondrial (ADNmt). 

Son más de 30 instituciones a nivel mundial con las que el Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Innsbruck ha colaborado en materia de ADNmt. La institución está detrás de EMPOP, una base de datos accesible por Internet, reconocida a nivel internacional como líder en el análisis de ADNmt forense.

Este instituto ha sido responsable de manejar peticiones internacionales, como la identificación del ADN de las víctimas de Asia por el tsunami de Sri Lanka, investigaciones sobre el supuesto cráneo de Wolfgang Amadeus Mozart y el análisis de restos de las víctimas del régimen militar Chile de 1973, entre otros casos históricos.