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Nacido en Argentina el 2 de junio de 1975, estudió cine entre 1993 a 1996, Lisandro Alonso comenzó a grabar cortometrajes en formatos digitales como VHS, pero decidió apartarse del mundo moderno y volver a lo análogo para explorar la película de cine y su negativo para sus propias películas.
El realizador ha emergido del cine independiente y se ha mantenido en este rubro a pesar de que sus filmes tengan una trayectoria escondida de la audiencia cinéfila tradicional, ya que estos han destacado en festivales como el de Oslo, Viena, Cannes, Gijón, Huelva, Rotterdam, entre otros.
En entrevista para Reporte Indigo, Lisandro Alonso habló de su experiencia como independiente, de sus proyectos cinematográficos y del aprendizaje que le ha dejado trabajar en el séptimo arte y con el actor Viggo Mortensen, quien protagonizó –y produjo– su cinta “Jauja” (2014).
Filmar en siglo 21
De mirada profunda y contemplativa, el realizador respondió de manera franca al cuestionarle por qué se atreve a rodar en celuloide en pleno siglo 21, ya que la mayoría de los cineastas han migrado al cine digital.
“A mí me gusta el 35 (milímetros) me gusta cómo se ve (…). Y por más que se haga la post producción de manera digital y se proyecte en DSP, me acostumbré a la película de 35, será romántico o será que me creo más mi trabajo cuando veo una cámara de cine que cuando veo una cámara de video”, señaló.
En el caso de “Jauja”, la película fue compuesta en un aspecto de relación de 1.85:1 (el formato estándar panorámico de cine), “pero cuando mandamos a revelar nos ponía la ventana sobre el negativo y a veces me cortaba la frente o mal las piernas de los personajes, entonces le pedí al laboratorio que quitara la ventanilla del 1.85:1 y que me mandara el full frame”, contó Lisandro.
De esta manera “Jauja” quedó en un formato 4:3, el cual es el estándar de las televisiones o monitores de la década de 1990, mostrando todo lo que imprime el negativo, lo que en palabras de Alonso lo remitía a westerns clásicos “que me gustaban mucho, me llevaba a otro tipo de lectura de la película inmediatamente”.
Salir a espacios abiertos
El cineasta registra en su trabajo generalmente a personas que carecen de la preparación de la actuación, inclusive que tal vez no saben ni leer o escribir, y refiere que también le gusta filmar en espacios abiertos, pues las ciudades grandes “no me seducen, no me interesan como lugar para filmar, lo que me interesa es tratar de salir con las cámaras y los micrófonos y descubrir esos lugares que no conozco”, dijo Alonso.
Los hermanos Lumière son una influencia para Lisandro Alonso, ya que ellos “ponían la cámara y no sabías si era cine documental o de entretenimiento o de observación, hasta el día de hoy sigo pensando que el cine para mi es eso, como poner una cámara delante de un tren que viene y no saber si es una película de género, solamente mirar, observar y tratar de no encasillar”.
Cannes: su lugar de despegue
Los filmes de Alonso han contado con su primicia internacional en el Festival de Cannes, misma trayectoria que inició con “La libertad” (2001). En la edición 2014 del certamen francés “Jauja” se hizo acreedora de premio FIPRESCI en el apartado Un Certain Regard.
Jauja: El lazo con Mortensen
El proyecto más ambicioso de Alonso al momento ha sido “Jauja”, y una de las razones de ello es que se involucró Viggo Mortensen, cambiando radicalmente el rumbo de la cinta.
El argentino comentó que “fue una película que encontramos en el camino”.
Mortensen se metió de lleno a la producción de “Jauja” y financió parte del filme con sus propios recursos, prestó dos de sus temas compuestos junto al guitarrista Brian Patrick Carroll “Buckethead” de su álbum “Please Tomorrow” (2004), y hasta supervisó el subtitulaje de la película al francés, español e inglés.
“De hecho el título ‘Jauja’ sale de un comentario que me hace él, hasta antes de pasarla al Festival de Cannes era una película que no tenía título (…) el título fue algo que él arrojó (…) Viggo es alguien que yo no estaba acostumbrado a tener de mi lado, soy un tipo que empieza una película solo y las termina solo porque mi productora soy yo mismo”, se sinceró Alonso.
Al momento de tomar decisiones importantes de distribución o de productores europeos “siempre estaba de mi lado (…) era alguien que trataba de hacer mi mejor película, cuál es la mejor película posible que puede hacer Lisandro, creo que pronto Viggo va empezar a dirigir, lo vi muy involucrado y me parece que ya no lo tienta tanto la actuación como a lo mejor ponerse a dirigir su propio proyecto”, argumentó el realizador.
Proyecto a futuro
La nueva cinta de Alonso tendrá como escenario una locación entre Bolivia y Brasil; el director se encuentra interesado en adentrarse a la jungla y explorar la tierra indígena que él considera que se encuentra olvidada.
Contará también con Dakota del Sur, en Estados Unidos, como locación; y respecto al idioma no se encuentra definido si será hablada en portugués o inglés. Alonso explicó que su cine se transmite más por el lenguaje visual que por el habla de los personajes.
Por este lado el argentino cree que su nuevo filme se asemejará a “Jauja”, ya que se expresará más a través de las imágenes que con el lenguaje que reflejen sus actores, pero todavía no lo tiene claro hasta iniciar el rodaje.