El problema es la audiencia

Nunca se le dará gusto a todos. Además, en gustos se rompen géneros y esa podría ser la mejor manera de describir la reacción y respuesta por parte del público hacia el show del medio tiempo durante la 50 edición del Super Bowl.

Los memes no solo sirvieron como burla a la participación de la banda inglesa Coldplay, también se encargaron de inundar las redes sociales con críticas hacia la escenografía. 

Y nada ayudó que el espectáculo fuera de día, lo que hizo que no luciera el número musical como se hubiera esperado.

María Alesandra Pámanes María Alesandra Pámanes Publicado el
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países del mundo tuvieron señal del partido
"Lo peor que puede pasar es que te conviertas en un meme”
Apple MartinHija de Chris Martin

Nunca se le dará gusto a todos. Además, en gustos se rompen géneros y esa podría ser la mejor manera de describir la reacción y respuesta por parte del público hacia el show del medio tiempo durante la 50 edición del Super Bowl.

Los memes no solo sirvieron como burla a la participación de la banda inglesa Coldplay, también se encargaron de inundar las redes sociales con críticas hacia la escenografía. 

Y nada ayudó que el espectáculo fuera de día, lo que hizo que no luciera el número musical como se hubiera esperado.

Mucho tiene que ver el hecho de que el partido fue catalogado como “aburrido” y que no tuvo los momentos y/o jugadas emocionantes que esperaban los espectadores al tratarse de una final de la NFL. 

A su vez, la opción de Coldplay para el medio tiempo (aunque estuvo acompañado por Beyoncé y Bruno Mars) fue ampliamente criticada desde que se dio a conocer la noticia de que participaría. 

Durante el evento, las expectativas no fueron superadas, pese a que la audiencia fue récord y las cifras no oficiales apuntan a que más de 160 millones de personas vieron el Super Bowl (el año pasado esa cifra osciló los 114 millones).

El problema del medio tiempo en el Super Bowl no es si hay un tiburón en el lado izquierdo de Katy Perry bailando y equivocándose (como sucedió el año pasado), o si la cantante se vistió como Taylor Swift, tampoco que la escenografía parece ser un festival de la primavera o si Lady Gaga cantando el himno daba la viva imagen de Yuri (como señalaron los memes). El problema es la audiencia que está acostumbrada a que si no se trata de algo espectacularmente fuera de serie, no quedará satisfecha.

Y bajo ninguna circunstancia perdonará si la canción es “lenta” o “aburrida” para ser un Super Bowl, si Beyoncé portó un vestuario como si se tratara de cualquier concierto o evento en televisión, o si Chris Martin pasó casi desapercibido en esta presentación en vivo.

El público actual, acostumbrado al streaming y al binge watching, pide a gritos que en lugar de cantidad, se le brinde calidad. No se tiene que “resucitar” a Elvis Presley para seleccionar a artistas –norteamericanos y no ingleses como Coldplay– y brindar un show tal como si los fallecidosMichael Jackson, Queen y David Bowie se unieran en un evento que año con año espera sorprender a la audiencia internacional.

No fue propaganda gay

El show del medio tiempo del Super Bowl, a cargo de Coldplay, Beyoncé y Bruno Mars, fue etiquetado como propaganda gay debido a que utilizó distintos colores estilo “arcoíris”.

Sin embargo, la escenografía iba acorde al nuevo álbum de Coldplay, “A Head Full of Dreams”, y el mensaje de “I Believe in love” no tenía relación alguna con propaganda a favor de los derechos de los homosexuales.

Lo mejor del Super Bowl

Sin duda, pese a que dio material para memes por doquier, la gran estrella del Super Bowl fue Lady Gaga. Entonó el himno como pocos lo han hecho en la historia de este evento, se lució ante el público en el Levi’s Stadium, así como con los televidentes.

No solo eso, también fue la más buscada en Google durante la transmisión completa del partido, inclusive por encima de Peyton Manning, quarterback de los Broncos de Denver, y de Chris Martin y Beyoncé, quienes se encargaron de darle color al show de medio tiempo.

Ni siquiera los memes y vines en los que aparecía cantando como Yuri –o en los que se le comparó con Laura León y Effie Trinket, personaje de la saga de “The Hunger Games”–, pudieron opacar su participación en el Super Bowl, en donde solamente se encargó de cantar el himno nacional de Estados Unidos.

Algo similar sucedió en la entrega de los Premios Oscar del 2015, cuando Lady Gaga rindió tributo al 50 aniversario de “The Sound of Music”. Gaga demostró que tiene talento vocal y dejó con la boca abierta a Julie Andrews (protagonista de “The Sound of Music”), a los asistentes del Teatro Dolby y a los espectadores de la ceremonia que vieron la transmisión en vivo por TV y/o por streaming.

El rey… de los memes

Sustituyeron su imagen por la del Tiburón de la Izquierda de Katy Perry (del Super Bowl 2015) gracias a la ayuda de Photoshop, se burlaron por su selección de canciones y los colores con los que se pintó el Levi’s Stadium, y aún así Chris Martin estuvo entre lo más buscado en Google durante el encuentro que le brindó el triunfo a los Broncos de Denver.

Sin embargo, su espectáculo junto a Beyoncé y Bruno Mars no fue del todo bien recibido por la audiencia de este magno evento deportivo. De hecho, Martin protagonizó memes desde antes de que se llevara a cabo el Super Bowl, en los cuales se aludía  de antemano a que Coldplay sería el más ignorado del show.

Y es que, de acuerdo a datos registrados por Google News Lab, los usuarios buscaron a Chris Martin por los memes que generó y para encontrar la respuesta a preguntas como: “¿Qué tan viejo está Chris Martin?”, “¿Qué tan alto es?” y “¿Está casado Chris Martin?”. 

Antes de que se realizara el Super Bowl, Chris señaló que su hija Apple (cuya madre es la actriz Gwyneth Paltrow), le dijo que “lo peor que puede pasar es que te conviertas en un meme”, y así fue.

 

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