Todo comenzó como un experimento de observación, la realidad saltaba ante los ojos de Michel Franco y no pudo negar lo que es la cotidianidad mexicana para miles de mujeres: un embarazo a temprana edad no deseado.
El realizador tomó la experiencia y la convirtió en guión para filmar “Las hijas de Abril” (2017), cinta galardonada en Cannes en la sección Una cierta mirada con el reconocimiento especial del jurado y que este 23 de junio se estrena en México.
“Quería hacer una película muy femenina, quería también entender el papel de las mujeres en la sociedad hoy en día (…) tomo mucho prestado de la realidad, lo que observo y creo que por eso a la gente le interesa mi cine más allá de los festivales, porque estoy retratando cosas cotidianas”, indica en entrevista para Reporte Indigo.
Al cuestionar a Franco si es que México necesita más mujeres en el poder político el artista dice que no sólo es necesario que se involucren en el quehacer gubernamental, sino que tomen mayores espacios profesionales en la actualidad.
“Necesitamos más mujeres en todos lados, yo confío mucho en las mujeres, siento que tienen una visión más completa de lo que necesita la gente. Son las que educan, son las que tienen el pulso de lo que nos puede llevar a un crecimiento en todos los sentidos”, se sincera Franco.
La cinta es protagonizada por la española Emma Suárez, quien trabajó recientemente con Pedro Almodóvar en “Julieta” (2016), Franco obtuvo un presupuesto de 24 millones de pesos para producir el proyecto y filmarlo en Puerto Vallarta, Jalisco.
El arco del dolor
Franco distingue sus dramas por ser un reflejo de la sociedad, pero lo que los une es el dolor que viven sus personajes, y “Las hijas de Abril” no es la excepción.
En el filme Valeria queda embarazada a los 17 años, quien vive con su hermana Clara, pero al llegar el recién nacido las dos no pueden sostener económicamente la casa por lo que deciden hablarle a su madre Abril, que lleva años ausente del nicho familiar.
“Me interesa siempre conocer más de quiénes somos a través de poner a mis personajes en situaciones límite, creo que es cuando el ser humano realmente demuestra su naturaleza (…) creo que entender a la familia es lo que te lleva a entender a la sociedad, hacer eso en el cine me interesa mucho”, confiesa el director.
El dolor, considera Franco que es un ingrediente universal, lo que él atribuye a que esto le haya hecho ganar en Cannes en esta ocasión y en veces pasadas.
“Yo creo que la manera en que Tim Roth, o Uma Thurman o los hermanos Coen se han relacionado y han premiado esas películas es la misma manera en que el público genera el conecte (…) Estos jurados no es que intelectualicen y busquen descubrir el hilo negro, buscan ser conmovidos, películas honestas que les lleguen y eso es lo que creo que han valorado en Cannes”, argumenta.
Entre lo político y la comedia
La realidad política es algo que también le inquieta a Franco para llevarla a la ficción, y aunque no lo haya hecho en sus películas hasta ahorita, si piensa a futuro realizar un argumento que refleje los problemas del narcotráfico o la violencia.
Pero su mira más próxima está en la comedia, la cual se encuentra revisando con tintes de humor negro para un proyecto en televisión, ya que apostó por un programa piloto y del que todavía está cocinándose una serie que podría estelarizar Eugenio Derbez.
“Me encanta Larry David, es una buena referencia pero otra vez es tele no cine. Yo te puedo hablar de Woody Allen, pero decir ‘voy a hacer comedia’ y además se va parecer a ‘Annie Hall’, pues ya sería imposible”, comenta Franco.
El director no descarta que el género podría llevarlo al cine, pero todavía no escribe un guión que tenga la suficiente carga humorística que él quisiera ver en pantalla.
Puerto Vallarta: locación fetiche
El director mexicano sabía que quería nuevamente un escenario en donde la playa y el mar fueran parte medular de la historia, así que después de “Chronic” (2015) regresó a Puerto Vallarta como lo hiciera en “Después de Lucía” (2012) para tener de fondo la costa jalisciense.
“Lo que más me interesa además de la belleza y lo que atrae como destino turístico es que tiene una clase media, no es como Cancún que pareciera que esta sólo al servicio del turismo o Tulum que también está al servicio del turismo, pero que es como hippie. Parece que Vallarta tiene una clase media real sólida donde me es fácil ubicar a mis personajes”, ahonda en el tema el realizador.
El mar juega un papel importante para Franco en la narrativa de su historia, por eso era necesario volver a este paraje. Un ejercicio que realizó con las actrices protagónicas del largometraje fue dejarlas convivir en la casa donde se desarrolla la película, sin nadie que las molestara durante unos días.
Emma Suárez, Ana Valeria Becerril y Joanna Larequi, quienes interpretan a Abril, Valeria y Clara respectivamente, hicieron el desarrollo de sus personajes a puerta cerrada en dicha casa y aprovecharon para leer el guión.
La otra actriz
Para el protagónico de Abril, Franco explica que en un principio trabajó el personaje con una actriz estadounidense ganadora de un Oscar. De hecho, el proyecto se iba a hacer en Estados Unidos, pero la producción cambió eventualmente a México.
“Esta película iba a ser gringa también igual que ‘Chronic’, ‘Chronic’ iba a ser mexicana y cambió a gringa, esa vez empecé al revés, dije ‘voy a hacer otra película en Estados Unidos y ya estaba trabajando con una actriz americana que tiene Oscares y demás y cuando cambié radicalmente de idea y sabía que tenía que hacer otra película en México, pensé como suplir a esa actriz y llegó Emma Suárez”.