Ilegalmente ‘topless’
La sociedad brasileña vive en la hipocresía. Mostrar los pechos en las playas de Río de Janeiro, donde las mujeres curvilínea no dejan nada a la imaginación, es considerado como un “gesto obsceno” por una norma que data de 1940 y penaliza al mismo con una multa de entre tres meses a un año de prisión.
Eugenia RodríguezLa sociedad brasileña vive en la hipocresía. Mostrar los pechos en las playas de Río de Janeiro, donde las mujeres curvilínea no dejan nada a la imaginación, es considerado como un “gesto obsceno” por una norma que data de 1940 y penaliza al mismo con una multa de entre tres meses a un año de prisión.
Salvo que se trate de una playa nudista, caminar topless en la arena es ilegal y mal visto. De ello está familiarizada la actriz Cristina Flores, quien posaba para una sesión de fotos en una playa carioca. En cuanto se quitó la parte de arriba del bikini, fue abordada por policías que le advirtieron que tendrían que detenerla si no se cubría.
Hecho que en diciembre de 2013 impulsó el movimiento de protesta “Toplessaço”, que invitaba a las mujeres a manifestarse topless ante la ley.
Pero la convocatoria se quedó corta, en parte porque “(…) los hombres se mostraron muy agresivos con las chicas (…)”, explicó al ABC la periodista Ana Paula Nogueira, organizadora de la segunda edición del “Toplessaço”.
El nuevo capítulo del movimiento se puso en marcha esta semana, en la playa Ipanema de Río de Janeiro pero, esta vez, las caras de la nueva iniciativa son tres musas, lo que, según la BBC, “para muchos, es una distorsión de la idea (el “formato de concurso de belleza para defender la normalización del topless”) de que la práctica debe ser vista con naturalidad y no asociada a la belleza o sensualidad.
La organizadora de la primera edición, la actriz y activista Ana Ríos, quien no tiene ningún vínculo con esta segunda edición, dijo al diario británico que la iniciativa “’desvirtúa completamente’ la idea original de normalizar el cuerpo y crear ‘un movimiento colectivo en el que todas las mujeres pudieran sentirse bien’”.