Investigadores del Instituto Nacional de Salud de Bethesda lograron, por primera vez, eliminar las células cancerígenas de una paciente con cáncer de mama.
Steven A. Rosenberg, junto a su equipo, utilizó un tratamiento de inmunoterapia con células T para conseguirlo. En un artículo publicado en la revista “Nature” se explican las características moleculares de estas células cancerosas dirigidas, lo que les ha permitido estimar altas probabilidades de éxito de esta terapia en otros pacientes oncológicos.
Rosenberg asegura que existen dos tipos de inmunoterapias para tratar el cáncer, la primera activa las células T, responsables de coordinar la respuesta inmune celular, dentro del cuerpo del paciente a través de anticuerpos inyectados. En la segunda, las células T se extraen de la sangre o tumor del paciente y solo las que reconocen el tumor son cultivadas y después inyectadas de nuevo en el cuerpo del enfermo.
El éxito de estas terapias varía mucho entre los tipos de cáncer y, hasta la fecha, los ensayos clínicos de la primera modalidad de inmunoterapia habían fracasado para tratar el cáncer de mama.
Puedes leer el estudio en la siguiente liga: https://www.nature.com/articles/d41586-018-05251-5