La apicultura es necesaria para alcanzar la seguridad alimentaria
En el marco del “Día Nacional de la Abeja”
Indigo StaffConscientes de que la producción agropecuaria en México deberá aumentar en 60 por ciento hacia el año 2050, para estar en posibilidades de alimentar a los 150 millones de personas que se prevé habitarán al país, autoridades, investigadores, agricultores, apicultores e integrantes de la sociedad civil se comprometieron a impulsar una agenda común en favor de la preservación y el cuidado de las abejas.
En el marco del “Día Nacional de la Abeja”, la asociación Protección de Cultivos, Ciencia y Tecnología A.C. (PROCCyT) anunció los resultados del Conversatorio: “Juntos por la salud de los polinizadores”, que llevó a cabo con autoridades y especialistas en agricultura y apicultura, quienes coincidieron en la necesidad de promover la importancia ambiental, social y económica de las abejas.
Gloria Meléndez, directora ejecutiva de la asociación, presentó una serie de recomendaciones encaminadas a fortalecer la producción agropecuaria, entre las que destacan impulsar buenas prácticas apícolas y agrícolas; identificar, ubicar y combatir el comercio ilegal de plaguicidas sin registro; fomentar la investigación y el desarrollo orientados a mitigar los impactos multifactoriales, y alinear los programas de apoyo de insumos agrícolas y subsidios a colmenas con buenas prácticas.
La Seguridad Alimentaria es un tema central en las agendas de desarrollo de distintos países. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura estima que para el año 2050 seremos más de 9 mil millones de habitantes en el mundo, y tan solo en México la población alcanzará la cifra de 150 millones.
Para impulsar la producción agrícola, las tecnologías en el campo han evolucionado: cada año, la industria de la ciencia de los cultivos invierte más de 7 mil millones de dólares en investigación y desarrollo de nuevas moléculas de plaguicidas más seguras y específicas, de forma tal que los agricultores puedan implementar prácticas agrícolas modernas con las que las abejas y otros polinizadores puedan coexistir sin peligro.