Hey tu, si tú, te hablo a ti, el que lee este artículo de periódico sentado en el metro, cómodamente en la silla de tu oficina o usando el retrete para deshacerte de esa cena alta en vitamina T que te empacaste anoche (sí, me refiero a esa torta de milanesa con queso, el tamal oaxaqueño rojo o esa orden de tacos con cebolla y cilantro con la que rompiste la dieta).
A ti “godín” que seguramente busca algo entretenido para hacer este fin de semana con su novia, que tal vez estás aburrido del boom que han tenido Iñárritu y DiCaprio con “El Renacido” y eres de los que piensa que el Oscar lo debe de ganar el oso pues, ¿qué crees? Ya hay algo nuevo en el cine.
Si tienes ganas de carcajearte a morir, si te gusta la violencia gráfica y aparte eres amante de los cómics, tal vez te venga bien ver “Deadpool”, la película protagonizada por Ryan Reynolds, quien también pagó porque se realizara.
Y no, si crees que esta es una nota aburrida llena de spoilers, te equivocas, no te contaré detalles de la película, pero sí te daré motivos para ir a verla.
Burlándose de Hollywood
El humor sardónico de Deadpool es una herencia que viene desde la historieta gráfica, ya que el personaje rompe cuarta pared y se sale del canon regular de solamente comportarse como un superhéroe.
El alter ego de Wade Wilson que se viste de rojo y negro le habla directamente al lector, pretendiendo salir de la tinta, lo cual ha hecho que este personaje tenga un nexo carismático entre los lectores de cómics.
La cinta de Reynolds sigue el mismo efecto desde el principio, además de que no escatima en bromear de manera pesada con las franquicias de cómics y distintas películas de acción creadas por Hollywood.
Franquicia garantizada
Desde antes de estrenar la película se barajaba la posibilidad de una secuela y apenas Fox estrenó el filme se anunció que daba luz verde al proyecto.
“Deadpool” todavía no junta ni 20 millones de dólares en taquilla pero la aprobación del público que la ha podido ver en funciones previas al estreno aclama la cinta por su humor y por mantener el espíritu vivo del personaje, que constantemente se burla de Wolverine.
Reynolds encarnó a Wade Wilson en el filme de “Wolverine” del 2007 y había expresado su interés por personificar a Deadpool desde 2003, pero como el estudio enlató el proyecto por años prefirió irse a la franquicia de Linterna Verde y hacer la cinta homónima del 2011.
Fue un año después que Reynolds hizo unas pruebas de efectos visuales enfundado en el personaje de Deadpool, pero en julio de 2014 el material se filtró, por lo que en septiembre del mismo año, a Fox no le quedó más que publicar que en 2016 saldría la cinta del personaje mutante.