La música todo lo puede
Platón decía que "la música es para el alma lo que la gimnasia para el cuerpo". Y lo cierto es que la música no solamente brinda beneficios emocionales, también puede ser la terapia perfecta a nivel físico y biológico.
De hecho, si se combina con tecnología, se crea una de las alternativas medicinales y terapeúticas más eficaces y futuristas que hay.
Cecilia Vázquez
Platón decía que “la música es para el alma lo que la gimnasia para el cuerpo”. Y lo cierto es que la música no solamente brinda beneficios emocionales, también puede ser la terapia perfecta a nivel físico y biológico.
De hecho, si se combina con tecnología, se crea una de las alternativas medicinales y terapeúticas más eficaces y futuristas que hay.
Ejemplo de ello es la compañía PureTech, que trabaja con diferentes instituciones y académicos en el llamado “The Sync Project”, que busca reunir información de servicios de música y datos de usuarios para tratar diferentes padecimientos.
La música y sus efectos en la salud han sido comprobados por diferentes estudios a lo largo de los años pero este proyecto quiere ahondar en los específicos de canciones y enfermedades, para desarrollar productos que tengan un impacto real y medible en las personas.
“The Sync Project” fue revelado este año en el festival South by Southwest de Texas con el apoyo de la compañía bostoniana PureTech. Su meta es comenzar a trabajar en el insomnio, tratamientos cognitivos, impedimentos del habla, coordinación motora, depresión, fatiga y autismo.
Uno de sus fundadores, Alexis Kopikis, explicó en The Atlantic que este es el momento ideal para la iniciativa, ya que en la actualidad coexisten servicios de música como Spotify y Pandora, al mismo tiempo que hay tecnología portátil, como el Apple Watch y otros dispositivos que se usan a diario y se alimentan de la información de sus dueños.
Quienes trabajan en el proyecto creen que pueden hacer uso de los patrones musicales que ya forman enormes cantidades de datos.
“Hay una cosa mágica que la música parece hacer pero nadie entiende exactamente qué es”, dijo Kopikis, “¿es el ritmo, el tempo, o el momento del día en que la escuchas? ¿Es tu trasfondo cultural o las canciones que escuchaste cuando estabas en preparatoria? Hay un enorme número de atributos que se necesitan rastrear”.
El tema es personal para Kopikis, quien tiene un hijo de cinco años con autismo que deja de tener arrebatos como respuesta a la música.
“La música que me gusta seguramente es muy diferente a la música que te emociona a ti”, comentó Ketki Karanam, jefa de ciencia e innovación en el proyecto, “es muy importante tomar en cuenta preferencias personales porque es probable que la música que sea placentera para ti sea más efectiva en aliviar dolor o ansiedad que la música que no te gusta”.
Junto a Kopikis y Karanam también trabajan la directora de PureTech, Daphne Zohar como co fundadora y tienen en su consejo a Hugh Forrest, director de South by Southwest, el profesor de psicología en la Universidad de California en San Francisco, Adam Gazzaley, el neurólogo de McGill University, Robert Zatorre, académicos del MIT Media Lab, entre otros.
“Hay muy buenas investigaciones que indican que la música tiene el potencial de provocar beneficios significativos en muchas condiciones de salud”, dijo Karanam en The Atlantic, “pero no todos los estudios están bien diseñados.
“Las evaluaciones de lo que la música hace en el cuerpo están basadas en respuestas subjetivas y carecen medidas en tiempo real fisiológicas. Esa fue la motivación real para lanzar ‘The Sync Project’ y crear una plataforma que permita a todos los investigadores y clínicos hacer más y mejores estudios, y rastrear objetivamente lo que la música está haciendo bajo diferentes condiciones y en diferentes contextos y sistemas biológicos. Así esperamos detectar las propiedades de la música que son más efectivas para diferentes condiciones”, señaló Karanam.
El primer paso para el proyecto es reunir información, por lo que crearon una app que permite ver cómo la música afecta a las personas en tiempo real, incluyendo ritmo cardiaco, enfoque, emociones, etcétera.
También reunirá información biométrica de rastreadores de acondicionamiento, smartphones y demás.
“Estamos descubriendo qué sucede dentro de tu cuerpo mientras escuchas música”, afirmó Kopikis, “¿cómo se compara cuando no escuchas música y cómo cambia con el tiempo? ¿Qué atributos de la psicología están siendo cambiados y cómo podemos manipular este proceso para alcanzar un efecto deseado?”.
Ya están en las primeras etapas de desarrollar una app para ayudar a dormir a las personas y que pudiera ser lanzada en 2016. Además buscan compartir sus datos y estudios con otras compañías para crear diferentes aplicaciones.
Su compañía propietaria, PureTech, reunió 57 millones de dólares en octubre del año pasado y en enero anunciaron haber recaudado 50 millones más gracias a sus inversores. Sin embargo, “The Sync Project” no es la única iniciativa que manejan, pues tienen 12 más actualmente.
> Actualmente los estudios se conducen en un número reducido de investigadores y pacientes pero puedes conocer más de “The Sync Project” aquí
thesyncproject.com